Un médico asevera que los padres de los menores abusados por el ex concejal De Santos "no tenían claro lo que pasó"

Actualizado: martes, 6 octubre 2009 13:37


PALMA DE MALLORCA, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -

Un médico, Juan Andrés G., manifestó hoy en calidad de testigo en el juicio que juzga al ex concejal de Urbanismo Javier Rodrigo de Santos, acusado de presuntos abusos sexuales a menores, que cuando los padres de tres de los cuatro afectados acudieron a él -ya que pertenecía a la misma comunidad religiosa que el ex edil- para comentarle los hechos y pedir consejo, notó que los progenitores "no sabían nada de lo que había pasado", ni la primera ni la última vez que habló con ellos.

Así lo manifestó en su comparecencia ante el tribunal que juzga el caso, presidido por el magistrado Juan Catany, donde Gili, propuesto tanto por la Fiscalía como por la defensa, recordó De Santos formaba parte de uno de los grupos parroquiales de la iglesia de Son Oliva y acompañaba a su esposa aunque no formaba parte de las actividades, y que le conoció cuando el ex regidor era coordinador del Instituto Nacional de Salud (IN-Salud) en Baleares.

En cuanto a los padres de los tres menores, de nacionalidad chilena, incidió en que no le dijeron "absolutamente nada, y por su forma de expresarse no dejan nada claro". "Lo que me decían no me pareció gordo, la madre dijo que seguramente uno de sus hijos alguien le habría hecho tocamientos, y el padre dijo no saber nada, por lo que les dije que se reuniesen con sus hijos y se cerciorasen", incidió al respecto el médico.

"Le dije que se informaran y obraran en conciencia", prosiguió el testigo, quien recordó que posteriormente mantuvieron una reunión con el catequista de la iglesia de Son Oliva a la que acudía de Santos, Nicanor M., al tiempo que respecto a la relación entre la familia de De Santos y la de los supuestos afectados aseveró que era "totalmente normal". Respecto a la posibilidad de que sus hijos también hubieran sufrido tocamientos, manifestó que en ningún momento nadie les metió mano. "Y creo firmemente que a mis hijos nadie les ha tocado", enfatizó.

Justo en este instante el ponente del tribunal, Juan Pedro Yllanes, intervino en la vista para recriminar el tratamiento dado al hecho de que la familia de los tres menores fuese de nacionalidad chilena y en este sentido lamentó que "se esté vendiendo que los chilenos son del tercer mundo y que viven entre ensoñaciones, cuando es un país que está lleno de gente culta y que ha sabido superar una dictadura".

Es por ello que apeló a "no hacer más comentarios sobre el tercermundismo de Chile", a lo que el letrado de De Santos, José Ignacio Herrero, respondió que "en ningún momento" se ha incurrido en estas manifestaciones. Precisamente, ayer De Santos calificó a los menores denunciantes de "liantes y fantasiosos".

EL CATEQUISTA: "LES DIJE A LOS PADRES QUE SE CERCIORARAN"

En ese momento fue el turno de declarar del catequista de la iglesia a la que acudía De Santos, Nicanor M., quien recordó que conoció al acusado al estar en una reunión y ver "una cara desconocida" en la parroquia de Son Oliva, aunque negó haber tenido una conversación con él sobre presuntos abusos sexuales a menores por parte del ex edil, mientras que sí lo hizo con los padres de los presuntos afectados para instarles a cerciorarse y después "actuar en conciencia, acudiendo a la justicia".

Respecto a la persona que pudo haber efectuado los abusos, el sacerdote aseguró no recordar si mencionaron a De Santos pero "sí se refirieron a tocamientos" y le preguntaron qué hacer, a lo que respondió: "Si sois buenos, la Justicia no os hará nada".

Cabe recordar que la madre de los menores, Gladis Elena G., manifestó ayer que cuando los hijos les comunicaron los presuntos hechos, en el caso de uno de ellos, Mariano, éste "llegó un día desencajado y blanco, y me dijo que De Santos le había tocado". Por ello, acudieron posteriormente a contar lo ocurrido al catequista y dejaron "el asunto en manos de Dios, porque --se preguntó-- "¿qué otra cosa íbamos a hacer?".

En concreto, la Fiscalía atribuye a De Santos cuatro presuntos delitos de abuso sexual, dos contra la salud pública y un último de corrupción de menores o alternativamente otro contra la integridad moral. Es por este procedimiento por el que el ex concejal, sobre quien ya pesan dos años de prisión por un delito continuado de malversación de caudales públicos, abandonó el pasado 30 de marzo la cárcel de Palma, en la que se encontraba de forma preventiva desde el 27 de junio de 2008, tras abonar una fianza de 100.000 euros.

Mientras tanto, en su escrito, la defensa del ex edil, ejercida por el letrado José Ignacio Herrero, niega que se produjesen estos hechos ya que "existe incluso imposibilidad física para que se realizasen", al tiempo que afirma que De Santos "no ha cometido delito alguno", por lo que "sin delito, no cabe hablar de autoría". Es por ello que el abogado del ex concejal pide la libre absolución para su patrocinado.