El Síndic d'Aran aplaude la coordinación de los servicios de emergencias de la Generalitat y Aran
VIELHA (LLEIDA), 23 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las administraciones catalana y de Aran apuntan a la niebla como posible causa del accidente que esta mañana costó la vida a cinco trabajadores de la empresa Geobrugg que viajaban en un todoterreno que, al salirse de una pista forestal, se despeñó por un terraplén muy pronunciado de más de 400 metros en Vilac, en la Val d'Aran (Lleida).
Así lo apuntaron, en una rueda de prensa en el Conselh Generau d'Aran, el director de Emergencias de los Bomberos de la Val d'Aran, Joan Canalies, y la directora general de Medio Natural de la Generalitat, Núria Buenaventura, a la espera de que finalice la investigación que determine las causas exactas del accidente.
El delegado de la Generalitat en el Alt Pirineu i Aran, Víctor Orrit, confirmó en una rueda de prensa que cuatro de los ocupantes fallecieron cuando el vehículo se despeñó. El quinto ocupante, de nacionalidad senegalesa, pudo ser rescatado con vida por los servicios de emergencias, pero falleció cuando era trasladado en estado crítico al Hospital de Vielha en helicóptero.
Los fallecidos son Aliou D., un senegalés de 30 años; Luis Florencio C.Z., un ecuatoriano de 25; Rodrigo Wilson C.G., un boliviano de 26; Petru A., un rumano de 43, y Jianjun C., un chino de 38. Todos ellos eran vecinos de Lleida y trabajaban en la zona desde el verano para Geoburgg, especializada en sistemas contra aludes, desprendimientos de rocas y taludes inestables.
Orrit agradeció al juzgado de guardia que se encargó del caso por enviar los cadáveres directamente a Lleida, tanto por la falta de recursos como para evitar el desplazamiento a los familiares.
Las víctimas viajaban entre otros dos vehículos de Geobrugg y cuando el último de ellos perdió de vista al todoterreno accidentado, preguntó al conductor de un turismo que subía por la vía si se había cruzado con el automóvil. Al obtener una respuesta negativa, empezaron a buscar a sus compañeros, según explicó el director de emergencias de los Bomberos de la Val d'Aran, Joan Canalies.
La directora general de Medionatural explicó que los fallecidos conocían bien la zona, pues trabajaban desde el 1 de agosto en la instalación de barreras de protección frente a aludes y desprendimientos, trabajos que ya estaban en una fase muy avanzada.
El Síndic d'Aran, Francesc Boya, aplaudió el buen funcionamiento y coordinación de los servicios de emergencias, tanto de la Generalitat como de Aran, pese a las dificultades que debieron afrontar para acceder al lugar del siniestro, junto al Camí d'Era Coma d'Auran y a 20 kilómetros del núcleo urbano más cercano. La escarpada orografía provocó que el rescate de los cuerpos no finalizara hasta casi las 13 horas.
Boya recordó otro accidente laboral que costó la vida a cinco operarios en el antiguo túnel de Vielha, en los años cuarenta. En aquella ocasión, las víctimas también eran inmigrados a Catalunya.
En el lugar, trabajaron seis dotaciones de los Mossos d'Esquadra y tres dotaciones terrestres de los Bomberos de la Generalitat, entre ellas una ambulancia. También se desplazó un helicóptero de los Bomberos con efectivos del Grupo de Apoyo de Actuaciones Especiales (GRAE).
La Conselleria de Trabajo abrió un expediente para esclarecer las causas del accidente, por lo que un inspector de trabajo y un técnico del Centro de Seguridad y Salud Laboral fueron a la zona del siniestro, para averiguar por qué el vehículo se salió de la víay las responsabilidades que puedan derivarse.
