Policía de Sevilla desarticula una organización dedicada al robo en el interior de despachos profesionales

Actualizado: martes, 23 diciembre 2008 12:58

En la operación han sido detenidos cuatro hombres que han podido estafar 300.000 euros en distintas localidades españolas

SEVILLA, 23 Dic. (EUROPA PRESS) -

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía de Sevilla han llevado a cabo una investigación conjunta desde el mes de julio sobre una serie de denuncias tramitadas por robos con fuerza en oficinas y despachos profesionales, con la particularidad del inmediato cobro en sucursales bancarias de cheques, talones o pagarés que se hallaban en el interior de los locales forzados.

La Policía informó en un comunicado de que en un principio las denuncias fueron investigadas de manera independiente hasta que las gestiones policiales mostraron a los agentes que se hallaban ante la acción de una banda organizada de delincuentes que actuaba con una gran profesionalidad y que era la responsable de los hechos denunciados.

A partir de esta hipótesis se formó un equipo de trabajo integrado por agentes de las Comisarías de Centro y de Nervión con la finalidad de esclarecer todos los hechos delictivos que se prolongaban ya durante tres meses.

Los lugares escogidos para los robos eran los despachos profesionales tales como bufetes de abogados, gestorías, constructoras o estudios de arquitectos que se ubican en edificios de oficinas. El momento de comisión de los robos se circunscribe, principalmente, a los fines de semana, los lunes y los martes en horas de cierre de las oficinas.

Los presuntos delincuentes realizaban un estudio previo del lugar, eligiendo un objetivo basándose en la existencia de pocos elementos de seguridad y en la probabilidad de hallar en su interior documentos bancarios y por último en la facilidad de ejecución. El objetivo básico de los robos era la sustracción de documentos bancarios, ya que el resto de efectos sustraídos no son de especial valor

Entre los objetos que sustraían se encontraban principalmente documentos bancarios, dinero en efectivo y material informático (ordenadores portátiles e impresoras láser) y de carácter digital (cámaras fotográficas).

Los autores forzaban las puertas de acceso mediante el empleo de herramientas como destornilladores de mediano tamaño o palanquetas, por lo que se les imputa un delito de robo con fuerza.

Como parte de los efectos sustraídos eran documentos bancarios en blanco, el autor rellenaba los mismos colocando la cantidad que estimaba conveniente bajo la modalidad de cobro al portador, lo que supondría un delito de falsedad documental. Las cantidades no solían ser elevadas para que los pagos pasaran desapercibidos.

INVESTIGACIÓN POLICIAL

Las investigaciones se iniciaron a partir de la recepción de varias denuncias de robos con fuerza perpetrados en oficinas situadas, principalmente, en la zona centro de Sevilla. La Policía detectó similitudes en el 'modus operandi', franja horaria de comisión y especialmente, en el detalle de cómo se apropiaban de talones bancarios que posteriormente eran cobrados en la mañana siguiente a la perpetración del robo.

Una vez que se recuperaron las imágenes obtenidas por las cámaras de seguridad de las entidades bancarias se comprobó que los cobradores eran siempre los mismos. Con estos datos se comenzó a investigar a personas que contaban con antecedentes policiales por hechos similares. Después de localizar a varios individuos se centró la investigación en uno en concreto, Juan Luis H.H., al que se le realizaron vigilancias y seguimientos comprobando que mantenía contactos con otras tres personas a las que posteriormente se identificaron.

Las investigaciones policiales dieron como resultado que se trataba de una banda criminal, perfectamente organizada y asentada en la capital hispalense desde enero de 2006, fecha en la que iniciaron su acción delictiva en distintos puntos de España a los que se desplazaban para cometer los robos en vehículos de alta gama alquilados, y posteriormente regresaban a Sevilla, con el botín. Las ciudades donde se han podido observar su acción delictiva son: Madrid, Toledo, Castellón, Granada, Málaga, Fuengirola, Marbella, Huelva, Córdoba, Jerez y Jaén.

A partir del 2 de julio y hasta el 15 de octubre, la organización comenzó a cometer los robos en despachos de Sevilla, principalmente en los barrios de Centro, Nervión y Triana. Sólo en Sevilla se les imputa un total de 12 robos con fuerza, 12 delitos de estafa y 12 delitos de usurpación de estado civil, ascendiendo el total en toda España a 26 delitos.

El total del dinero estafado se calcula en 300.000 euros aproximadamente en toda España y en Sevilla capital la cantidad estafada, según los cálculos de la Policía, se estima en 70.000 euros.

DETENIDOS

Por estos hechos fueron detenidos el colombiano Juan Luis H.H. como el jefe de la organización que perpetraba los robos en las oficinas y dirigía las operaciones de cobro; el también colombiano Alejandro C.C., encargado de la comisión de los robos en unión del jefe; el español Víctor G.T, encargado de realizar labores de cobro de los cheques sustraídos; y el nicaragüense Daniel R.R., que realizaba labores de información y salida-venta de los efectos robados.

Todos los detenidos fueron puestos a disposición de la Autoridad Judicial, que ha decretado el inmediato ingreso en prisión de todos ellos. La investigación continúa abierta y no se descarta la imputación de más de 40 hechos delictivos cometidos por la banda.