ZAMORA, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
El río Eria se desbordó hoy a la altura de la entrada de la localidad zamorana de Morales del Rey, en los valles de Benavente, lo que ha provocado serios daños en las tierras de labor de la zona y ha dejado más de un metro de agua y barro en la parte baja del pueblo.
Esta es la segunda ocasión, en menos de un mes, que Morales del Rey sufre una riada ya que la pasada, provocada por un episodio de lluvias similar al vivido en los últimos días, ya provocó serios daños en viviendas y tierras.
Esta vez, según aseguró la alcaldesa del pueblo, Ana Riesco, las aguas han entrado con mayor facilidad en el caso urbano debido a la rotura, en la pasada riada, de una defensa construida hace años por la CHD para evitar las crecidas del Eria.
La riada, que ha mantenido al pueblo incomunicado por carretera prácticamente toda la jornada, ha dañado seriamente los cultivos de maíz y patata. Salvo siete u ocho hectáreas de la vega del pueblo, "el resto", señaló la alcaldesa, "todo está anegado por las aguas".
A pesar de la espectacularidad de la inundación, no fue necesario evacuar ninguna vivienda y los vecinos vivieron con resignación, aunque tranquilos, la nueva riada. La mayor parte de las casas de las zonas inundables del pueblo están preparadas para la posible entrada de agua y por eso, los daños en el interior de las vividas han sido, en general, mínimos.
El nivel de las aguas empezó a remitir bien entrada la tarde, lo que permitió que los vecinos pudieran comenzar con las tareas de limpieza. Aún así, los agricultores de la zona aseguran que serán necesarias varias semanas, y eso si las lluvias cesan durante unos días, para poder entrar en las fincas, que se han convertido en una inmensa laguna.
