TERRASSA (BARCELONA), 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
A pesar de que Norma Gómez, una venezolana que hace 19 años que vive en España, ha cumplido ya 32 años de matrimonio con un marido español y tiene dos hijos nacidos en Madrid, no ha podido obtener la nacionalidad española ya que la Administración se la deniega constantemente.
En declaraciones a Europa Press Televisión, Norma explicó que ha presentado en múltiples ocasiones los documentos necesarios para conseguir la residencia comunitaria pero siempre se los devuelven.
Norma se mostró sorprendida ya que al llegar a España se le otorgó la residencia en Madrid sin ningún tipo de problema pero "en el traslado a Barcelona la residencia comunitaria despareció" y en lugar del permiso de residencia le fue entregado el carnet de inmigrante ilegal con permiso de trabajo.
Norma, que tiene cinco hijos de los cuales dos nacieron ya en España, aseguró sentirse "desprotegida" porque al no tener la documentación en regla se siente "como un fantasma". "Por donde quiera que ande soy una inmigrante ilegal, pero yo no me siento inmigrante ilegal sino ciudadana de este país", señaló.
Debido a su situación irregular, Norma explicó que no puede hacer una vida normal y "abrir cuentas bancarias y salir del país". Además aseguró haber perdido ofertas de empleo "interesantes" por este motivo.
Norma aseguró tener todos los papeles necesarios para ser una ciudadana española, pero ahora la Administración le reclama un certificado de matrimonio expedido en España, que no puede conseguir ya que se casó en su país de origen.
CERTIFICADO SELLADO POR EL TRIBUNAL DE LA HAYA.
En este sentido, Norma señaló que en vez de tener este documento tiene el certificado de matrimonio de Venezuela sellado por el Tribunal Internacional de la Haya, algo que debería bastar ya que con este cerificado nunca ha tenido problemas ni en Venezuela ni en la Haya.
Hace unos dos años, la afectada pidió una nueva cita con la Administración de la cual no obtuvo respuesta. Meses después, Norma recibió una notificación de la Delegación del Gobierno en la que aseguraban que la habían citado para entregarle la documentación pero ella nunca acudió.
Norma negó categóricamente que la hubieran citado y mostró un documento posterior en el que por enésima vez volvieron a denegarle su permiso de residencia.
