MADRID, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -
El coordinador nacional de Transplantes, Rafael Matesanz, consideró hoy "un gran logro para la sanidad valenciana y el sistema de trasplantes español" el éxito de un doble trasplante de brazo y mano practicado a una mujer en Valencia, que, a su juicio, "consolida" una técnica que es "el primer paso" para lograr con éxito en España el trasplante de rostro.
En declaraciones a Europa Press, afirmó que esta operación "pone a España en un club de países muy selectos", que practican la técnica bilateral, "de la que se pueden beneficiar muchas personas en España" que hayan sufrido un accidente o un traumatismo. El equipo de la Fundación Pedro Cavadas realizó con éxito, hace diez días, un doble trasplante de antebrazo y mano a una mujer de 47 años que los perdió hace más de 28 años.
La operación entrañaba la complicación de tratarse de "un trasplante de tejido compuesto", que, según explicó "es conceptualmente muy parecido al de cara". "Es un primer paso", reconoció Matesanz, que sin embargo apostó por "consolidar" la técnica referida a las manos por ser más frecuente y un paso necesario antes de retos complejos como el del rostro.
Asimismo, celebró que el equipo del Hospital de la Fe de Valencia "hayan actuado de forma muy prudente". "No se han lanzado; el trasplante se hizo hace diez días y no se ha dado a conocer hasta que no estuviera todo bien consolidado", lo que consideró un acierto.
Por último, destacó la importancia de una intervención que sólo se ha conseguido con éxito en 27 ocasiones, de ellas, 20 para un sólo brazo. "Este es el séptimo caso de ambos brazos", dijo el responsable nacional de trasplantes, que destacó el período transcurrido desde que la paciente perdió sus extremidades, que mejora los últimos avances en Estados Unidos, donde una persona perdió un brazo hace menos tiempo y fue trasladada con éxito.
"Este hecho es superior", dijo Matesanz, que explicó que, "hoy en día" un trasplante de un sólo brazo "no tiene sentido", porque "hay soluciones más prácticas que evitan someter a una persona a inmunodepresión por el resto de su vida" para evitar el rechazo. "En el caso de ambos brazos sí tiene sentido, porque a alguien inválido le devuelves la vida con esta posibilidad", concluyó.
