MADRID, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -
El primer vuelo sin escalas de una aerolínea comercial entre Sydney y Nueva York, operado por la australiana Qantas, aterrizó el pasado domingo después de 19 horas y 16 minutos, con 49 personas a bordo, entre pasajeros y tripulación.
El vuelo se ha utilizado para realizar una serie de experimentos de evaluación de la salud y bienestar a bordo dentro del proyecto 'Sunrise'. Estos datos se utilizarán para mejorar la calidad de los vuelos de la tripulación y los pasajeros en los vuelos de la aerolínea, así cómo para investigar la forma de evitar los problemas del 'jet lag'.
Tanto la iluminación de la cabina como las comidas se han supervisado durante el vuelo para ayudar a reducir el desfase horario, según los investigadores médicos y científicos que estudiaban el vuelo.
El programa 'Sunrise' de Qantas también incluye un vuelo de Londres a Sydney en noviembre y de Nueva York a Sydney en diciembre. La compañía espera que las conclusiones del estudio estén para finales de año.
