AENA - Archivo
MADRID, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -
Aena ha aplazado la presentación del Plan Estratégico 2018-2021 a analistas e inversores, prevista para el 7 de junio, hasta nueva fecha que "será comunicada oportunamente", según ha informado el gestor aeroportuario al mercado, un movimiento que puede interpretarse ante el posible relevo en la presidencia de la compañía, de la que el Estado controla el 51%.
El esperado nuevo plan estratégico de Aena contempla las líneas generales de la hoja de ruta de la compañía para el próximo trienio, cuyo primer accionista es el Estado a través de ENAIRE, gestor de la navegación aérea en España y su matriz.
La llegada de Pedro Sánchez a La Moncloa provocará previsiblemente el cese de 437 altos cargos del Estado en las próximas semanas y tiene sentido que la defensa del plan de futuro de Aena con el cambio en la presidencia del Gobierno sea liderado por otro equipo.
Al ser una empresa cotizada, cualquier movimiento obliga a comunicarlo al consejo de administración, que ha de ser convocado, hecho que por el momento no se ha producido.
Jaime García-Legaz, que fue secretario de Estado de Comercio en la primera legislatura de Rajoy y presidente de CESCE, asumió la presidencia de Aena apenas hace ocho meses (octubre de 2017) tras la dimisión de José Manuel Vargas que llegó al cargo de la mano del PP procedente del sector privado y tuvo sus más y sus menos en su última etapa a cuenta de la internacionalización de la compañía.
EJES DEL NUEVO PLAN.
En el plan 2018-2021 se contemplan 2.500 millones de inversión, de ellos 1.926 correspondientes a inversión regulada. Para este año, la inversión prevista es de 645 millones de euros -- de ellos 440 millones a inversión regulada-- en incluyen actuaciones en todos los aeropuertos de la red.
El plan fija la política de retribución al accionista vía dividendo en el 80% del beneficio neto individual, excluyendo partidas extraordinarias, que será aplicable a los ejercicios 2018, 2019 y 2020, manteniendo la retribución realizada en el último ejercicio fiscal.
La privatización del 49% de Aena para su salida a Bolsa en 2015 y los dividendos percibidos desde entonces como máximo accionista han supuesto una inyección de más de 5.400 millones de euros para el Estado.
Solo el año pasado las arcas públicas se embolsaron casi 500 millones a cuenta del dividendo. Con la nueva política de 'pay out', que solo cambiará si concurren "circunstancias excepcionales", el Estado recibirá más de 1.500 millones de euros los próximos tres años vía dividendo.
En cuanto al desarrollo inmobiliario, la nueva filial Aena Inmobiliaria identificará a los socios potenciales por tipo de activo para los planes presentados para Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat y definirá el modelo de cesión, además de hacer una valoración de activos para fijar un precio mínimo.
Para la expansión internacional, el principal reto de la compañía, es buscar alianzas estables con socios de referencia "de perfil preferentemente financiero". Se adquirirán participaciones en activos aeroportuarios internacionales mediante la creación o adquisición de sociedades vehículo independientes, en las que participará la filial Aena Internacional.
De esta forma se facilitará su expansión ante la rigidez del marco regulatorio para realizar adquisiciones mayoritarias por la participación del Estado, que tendría que ser aprobada por el consejo de administración. Los títulos de Aena se han dejado hoy un 1,09% en el Ibex.
