Actualizado 20/02/2018 19:37

El espíritu de Humor amarillo resucita con El castillo de Takeshi para demostrar que "los castañazos no tienen caducidad

El castillo de Takeshi
El castillo de Takeshi - COMEDY CENTRAL

MADRID, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

El espíritu de Humor amarillo, uno de los espacios que marcaron la televisión de los noventa, resucita con El castillo de Takeshi, el nuevo y surrealista concurso de Comedy Central que ve la luz este miércoles 21 de febrero a las 23:50 horas. Lo hará con una doble entrega que, según asegura Luis Fabra, uno de los cómicos que pondrá voz al espacio, demostrará que "la fascinación por los buenos castañazos no tiene fecha de caducidad".

Basado en el original Takeshi's Castle, que se emitió por primera vez en Japón en 1986 y se convirtió en un fenómeno de culto en todo el mundo, el regreso de los rollitos de primavera y el Laberito del Chinotauro está ahora ambientado en Tailandia y cuenta con Fabra, Manu Górriz, Susi Caramelo y Nico Lozano. Ellos son encargados de guionizar poner voz a los castañazos y piñazos de los nuevos cien concursantes que intentarán asaltar el castillo.

"Como guionista te encuentras ante la libertad total. Es una maravilla. La imagen no la puedes tocar, eso es lo que hay, pero es como si te ponen una película y te dicen 'Dóblales, di lo que tú quieras. Va a pasar lo que tú quieras que pase'", dice Fabra que reconoce para un humorista y guionista un espacio como este es "un privilegio".

"Es increíble porque como todo es tan absurdo da pie a hablar un poco de todo. De gente que pierde al autobús, a gente que está en la cola del paro o de dos señoras que se pegan por la última colonia del super", apunta entusiasmado el cómico y maestro de ceremonias de los Premios Yago.

NUEVOS PERSONAJES

Y es que, si bien es cierto que hay un innegable trabajo de guión detrás, "para no repetirnos en los temas entre programa y programa", la libertad de los cómicos es casi absoluta para respetar así el ese aire de cierta improvisación que también tenía el original. Pero, eso sí, El castillo de Takeshi cuenta con personajes nuevos y también nuevos nombres locos para las pruebas que atrapen la atención de los fans del viejo Humor amarillo y también de las nuevas porque "una toña bien dada... no tiene fecha de caducidad" y aquí, insite Fabra, "es donde se dan los mejores castañazos del mundo".

Guiados en esta ocasión por el líder de este surrealista ejército, el Mariscal Katana, los sacrificados participantes de El Castillo de Takeshi los concursantes deben superar pruebas como 'El puente de las pelotas', en la que llevan una bola dorada de un extremo a otro de un puente colgante esquivando tremendos balonazos; o 'El Panal Fatal', un desconcertante laberinto de puertas en el que solamente hay tres opciones: salir victorioso, caer al agua o ser capturado.

El primer programa comienza con cien valientes dispuestos al asalto del castillo. Poco a poco el grupo se reduce, ya que muchos quedan atrás al no poder con pruebas como 'A puerta fría', en la que no se sabe qué camino es el correcto hasta que se estampan para comprobarlo, o 'La cuesta de enero', esa pendiente maldita que los concursantes intentan escalar mientras esquivan las piedras 'estilo arqueólogo de acción' que les caen encima (o bien se las 'zampan' de lleno).

Cada vez menos participantes son capaces de mantenerse en pie y seguir avanzando, pero los que lo hacen se agarran con todas sus fuerzas a 'El hongo molongo' para evitar caer al agua, luchan contra terribles oponentes en combates de 'Sumo', y se lanzan al galope sobre las traicioneras piedras de la 'Sopa con tropezones'.