Actualizado 12/07/2006 22:36

'Hospital Central' cierra su undécima temporada con una audiencia media del 28%

MADRID (EUROPA PRESS)

Telecinco emite el próximo jueves, a partir de las 22:00 horas, el que será el último capítulo de la undécima temporada de 'Hospital Central'. La serie protagonizada por Jordi Rebellón y Alicia Borrachero, finaliza con una audiencia media de 4.846.000 espectadores y un 28,8% de share, convirtiéndose en el espacio más visto de su día de emisión. Se sitúa así como la serie de mayor audiencia de Telecinco y la segunda más seguida en el panorama nacional de ficción española durante la temporada, por detrás de 'Aquí no hay quien viva'. El capítulo más visto fue el emitido el pasado 24 de mayo en el que 5.274.000 espectadores siguieron la serie.

En su undécima temporada, 'Hospital Central' ha jugado con casos como la violencia de género, la donación de órganos, el cuidado de ancianos, las trágicas consecuencias de la conducción irresponsable, el Alzheimer o la adopción de niños. Paralelamente a los casos clínicos las tramas han potenciado el desarrollo de las vidas privadas de los protagonistas llegando a alcanzar un elevado toque dramático. Rusti ha decidido iniciar una nueva vida en el campo, Cruz se ha reincorporado tras su baja por maternidad, Maca y Esther esperan su primer hijo, Javier ha vivido la peor etapa de su vida con la separación, Dávila ha descubierto quién destapó a los medios el caso de los estafilococos, Carlos y Laura se han ido a vivir juntos, y los dos nuevos residentes, Luna y Edu, forman parte ya de la vida del hospital.

Como colofón final de la temporada 'Hospital Central' se despide con un capítulo lleno de sorpresas. Aimé intenta seguir adelante y no dejarse llevar por la soledad que la muerte de su hija y de su mujer le han causado. Tras la desconexión total de la máquina que mantenía con vida a Mª Ángeles se iniciará e proceso de transplantes del corazón, los riñones y los pulmones de la mujer del médico.

Además, la marcha de Jorge activará la frustración de Esther, que la acabará volcando contra Maca a quien culpa de que los asistentes sociales se hayan llevado al niño. Otra de las relaciones que entrará en crisis en el último capítulo será la de Vilches y Cruz. Esta última decide irse a Irlanda con su hija porque necesita tiempo para pensar. En lo que respecta al director del centro, la denuncia contra los malos tratos de Dávila hacia Begoña sigue adelante sin que puedan llegar a ningún acuerdo. Un final con futuro incierto de la undécima temporada de la exitosa serie de ficción de Telecinco.