ALMERIA, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Junta Local de Gobierno del Ayuntamiento de Almería adjudicó hoy a la Unión Temporal de Empresas (UTE), integrada por las empresas Construcciones Tejera S.A. y Facto Almeriense de Construcciones y Obras Públicas S.A., las obras de construcción y equipamiento del Museo de la Semana Santa, cuya primera piedra se pondrá el próximo viernes, según anunció el concejal del área de Desarrollo Económico, Empleo y Turismo, Miguel Cazorla (GIAL).
En un comunicado remitido a Europa Press, el Ayuntamiento de Almería señaló que la adjudicación de estos trabajos supone un paso definitivo para la ejecución del proyecto, diseñado por el arquitecto José María García Ramírez, tras un proceso administrativo "largo y complejo".
Tras la puesta de la primera piedra, la empresa adjudicataria cuenta con un plazo de ocho meses para terminar una obra "llave en mano", según la oferta presentada al concurso por la UTE y que tiene un presupuesto de 1.781.967, 28 euros.
El Museo de la Semana Santa, que se alzará en un solar de titularidad municipal de 398,82 metros cuadrados de superficie ubicado en la antigua Calle Duende, hoy Ronda del Beato Diego Ventaja, está incluido dentro del "anillo museístico" y pretende ser "un punto de encuentro del que participen todas las organizaciones relacionadas con el mundo cofrade y un instrumento para seguir avanzando en el conocimiento de la cultura y tradición de la Semana Santa almeriense", indicó Cazorla.
Según el proyecto, el museo contará con dos plantas y sótano, con una distribución que permite encontrar en sus dependencias, sala de exposiciones, sala de usos múltiples, salón de actos, recepción, almacén, archivo, salón regio, biblioteca, aseos, ascensor y espacios comunes.
Grandes lucernarios permitirán una iluminación exterior directa en el interior del edificio, que contará en algunas estancias con alturas de hasta siete y ocho metros para dar cabida a grandes estructuras del patrimonio de hermandades y cofradías.
Uno de los aspectos más singulares de la obra está en el tratamiento de su fachada, de 37,96 metros, en la que se utilizarán materiales como piedra natural y acero para permitir a la edificación un aire modernista, sin desentonar con el entorno propio de la Catedral.
