ALMERÍA, 2 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Almería y Cajamar han dado por concluidas, sin éxito, las negociaciones para que la entidad bancaria patrocinara las obras de ampliación del Estadio de los Juegos Mediterráneos, necesarias tras el ascenso de la U.D. Almería a primera división.
Así lo confirmaron ambos organismos en sendas notas, en las que coincidieron en que uno de los principales motivos de la falta de acuerdo se basó en el nuevo nombre del recinto, después de que Cajamar rechazara ayer la propuesta de la corporación municipal de denominarlo 'Estadio Cajamar-Almería 2005', mientras que la entidad que preside Antonio Pérez Lao aboga por 'Estadio Cajamar'.
La negociación, según Cajamar, surgió como resultado de la petición de esponsorización que el Ayuntamiento le hizo para poner el nombre de la entidad al Estadio de los Juegos Mediterráneos por un tiempo determinado "a cambio de una contraprestación económica".
La entidad valoró esta propuesta como una opción "beneficiosa" para el Ayuntamiento "porque le permite obtener una importante cantidad de dinero para destinar al estadio sin coste alguno para las arcas municipales", para la sociedad almeriense, que, a su juicio, podría disponer de una instalación de titularidad municipal con mayor aforo y para la propia entidad, puesto que contribuiría a "dar a conocer" y "reafirmar" su nombre "en nuevos ámbitos territoriales".
Sin embargo, apuntó que se trata de "una operación de patrocinio" y que el nombre "no puede ser otro que el de la entidad, sin ningún añadido que, por simbólico que pueda ser, crearía confusión y altera la denominación de la entidad".
CONSENSO MUNICIPAL.
Otro de los requisitos solicitados por Cajamar fue que la operación contara con el "asentimiento social" de los almerienses, expresado a través del consenso de sus representantes municipales "puesto que no tendría sentido pagar un alto precio si el convenio es cuestionado".
En este sentido, el alcalde de Almería, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, lamentó la "postura inicial" de los grupos de la oposición, "que no apoyaron la propuesta inicial de la entidad financiera y exigieron una serie de condicionantes que, a la larga, han resultado inaceptables para los responsables de Cajamar".
El alcalde añadió que "cada partido o cada grupo atiende a sus posturas o intereses y a veces es muy difícil encontrar el consenso pleno entre las diferentes fuerzas políticas". Asimismo mostró su pesar por la pérdida de una oportunidad "muy interesante" de encontrar un patrocinio que "evite gastos tan importantes al Ayuntamiento".
