Actualizado 04/06/2014 18:36

Málaga.- Cultura.- Unicaja clausura sus talleres de arte-terapia para personas con discapacidad intelectual

MÁLAGA, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -

Unicaja, a través de la Fundación Unicaja Ronda, ha clausurado una nueva edición de sus talleres de arte-terapia que, por cuarto año consecutivo, pretenden mejorar la calidad de vida de personas con discapacidad intelectual, así como la de sus familias.

Los talleres, pioneros en los museos españoles y que se han celebrado desde el pasado mes de febrero en el Museo Unicaja Joaquín Peinado, han estado dirigidos a niños y adultos con el objeto de favorecer en ellos el desarrollo de su capacidad creadora y potenciar el desarrollo de su autonomía.

Como novedad, este año se ha incorporado un nuevo taller, pionero en España, dirigido conjuntamente a los alumnos y a sus padres o madres, en los que se crea un ambiente singular y beneficioso para ellos. El acto de clausura ha contado con una exposición de una selección de los trabajos realizados por los alumnos durante el desarrollo de la cuarta edición de estos talleres.

Asimismo, se ha hecho entrega de un obsequio a cada uno de los participantes en los mismos. El éxito y beneficio de estos talleres, así como el avance de la gran mayoría de los alumnos en la soltura y habilidades adquiridas en creatividad, autoestima, autonomía y capacidades sociales han sido merecedoras de grandes elogios por ellos mismos.

El arte-terapia es una disciplina que persigue, a través de la práctica artística, la curación y la socialización de personas en situaciones vitales problemáticas. Este programa de arte-terapia forma parte del plan educativo que se viene desarrollando en el Museo Unicaja Joaquín Peinado desde 2008, y que pretende buscar nuevas metodologías exitosas adaptadas a los diferentes niveles formativos y enfocadas a apoyar a colectivos con necesidades especiales.

La organización de estos talleres de arte-terapia se enmarca en el interés de Unicaja, a través de sus fundaciones, por el desarrollo y fomento de iniciativas sociales, educativas y culturales en general, con especial atención a aquellas actividades que impulsen la integración social y el bienestar de los colectivos con necesidades especiales.

Los talleres se han dividido en tres grupos: uno para adultos, con capacidad para 24 personas; otro para niños en edad escolar, destinado al mismo número de alumnos; y un tercero donde han trabajado conjuntamente los niños con sus madres o padres, creando un ambiente muy singular, donde los alumnos adultos se convierten en niños para compartir, desde otra perspectiva, la experiencia para relacionarse con su hijo.

Para el grupo de niños, el objetivo específico de la realización de estos talleres es desarrollar el concepto de sí mismos para incrementar la habilidad de lidiar con el ambiente de competitividad frente a otros niños en el colegio. Por su parte, para el grupo de adultos, que no están sometidos a tanta exigencia, el objetivo es desarrollar aptitudes sociales y de autoestima para integrarse mejor en la sociedad, en el contacto día a día con el entorno social dentro y fuera de su casa.

Desde la entidad han destacado que quizás "lo más importante se produce en aquellos momentos mágicos muy personales en los cuales en el ambiente del taller creado, por el tema o entorno, uno descubre algo nuevo e importante de si mismo que lo convierte en muy valioso para su desarrollo".

Por último, el taller del grupo familiar ofrece a los niños la posibilidad de experimentar a jugar y trabajar como iguales a sus padres. Una clave fundamental para llevar a cabo este taller es lograr que los padres no ejerzan de "padres", si no que se relajen y disfruten de la actividad, lo que al principio entraña cierta dificultad pero que finalmente se consigue con la repetición de los talleres.

En este formato de taller, la madre o el padre tiene la posibilidad de conocer más a fondo a su hijo y la posibilidad de ofrecer un formato de juego y trabajo diferentes a los habituales, han precisado.

El trabajo que se ha desarrollado en estos talleres en el Museo Unicaja Joaquín Peinado ha sido una combinación de trabajo grupal e individual, con énfasis en distintas actividades plásticas y visuales que les permitieran adquirir y desarrollar "aprendizajes" de acuerdo con sus posibilidades e intereses.

Los talleres fueron inspirados en el proyecto titulado 'La maquina del tiempo', que contenía cinco temas principales que se desarrollaron en este orden; "el tiempo ¿Cómo lo percibimos? ¿Cómo lo medimos? ¿Qué significa para nosotros?; el invierno, tiempo de cobijo y de recogida; el otoño, tiempo de desprenderse y soltar; la primavera, tiempo de florecer y de crecer; y el verano, tiempo de abrirse y de conectar con el prójimo".

Por medio de la práctica artística, han apuntado desde Unicaja, las personas con diferentes discapacidades tienen la oportunidad de comunicar a los demás sus sentimientos y sus necesidades de forma perceptible. Las enseñanzas artísticas resultan una herramienta "ideal para el trabajo con personas con discapacidad intelectual convirtiéndose en un formidable metalenguaje que facilita el acceso a su mundo interior".

Entre los objetivos generales propuestos en estos talleres, que contemplan las necesidades propias de las personas con diversas capacidades, destacaron como prioritarios favorecer la integración social y cultural; activar y favorecer el movimiento, el cuerpo y su lenguaje en relación a canales perceptivos y sensoriales, reflejos, dinámica, general, coordinación motora, equilibrio, esquema corporal; aumentar la autoestima y la seguridad personal; y estimular y ampliar la capacidad perceptiva y cognitiva.