HUELVA, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Refinería 'La Rábida' ha instalado, durante la parada programada que la unidad del Platforming-Hydrobon de la planta de Petroquímica de Cepsa comenzó el pasado 5 de noviembre y que desarrollará a lo largo de 35 días, un intercambiador de última tecnología que ahorra energía y disminuye las emisiones de CO2.

Se trata, según explicó la empresa en un comunicado, de un único intercambiador de calor de tipo Packinox que sustituirá al tren de intercambio de calor actual de tipo carcasa-tubo, compuesto por siete unidades. De este modo, un solo cambiador más eficiente, el nuevo, cumplirá la función de estos siete, consiguiendo con una infraestructura más pequeña un ahorro energético en el proceso de esta unidad, y con ello unas evidentes mejoras energéticas y medioambientales, que se traducen en una reducción anual tanto en el consumo de combustible como en las emisiones anuales de CO2 de un 19 por ciento.

Durante esta misma parada se llevarán a cabo los trabajos de regeneración del catalizador de la unidad por la desactivación que genera su uso. A diferencia de otros catalizadores que sólo tienen un uso y después hay que deshacerse de ellos, éste se regenera en la propia Refinería y puede seguir cumpliendo otros ciclos de vida.

Asimismo, se desarrollará la inspección oficial de determinados equipos y se comprobará el estado de otros, aunque no sea obligatorio por ley y se realizarán diversas modificaciones de mejora en la planta de Petroquímica.

La inversión total que la Refinería va a desembolsar para llevar a cabo la instalación del intercambiador Packinox, la regeneración del catalizador y las diferentes inspecciones rutinarias supera los tres millones de euros y para realizar todas estas actuaciones contará con unos 250 trabajadores propios y externos durante los 35 días que durará la parada.

Asimismo, durante este año en la instalaciones de la Refinería 'La Rábida' también se ha desarrollado una importante parada en la unidad de Cogeneración en la que se implantó la tecnología DLN (Dry Low NOx), un nuevo sistema que, gracias a una inversión de unos 3,8 millones de euros, ha reducido las emisiones de NOx, instalando quemadores de bajo NOx y logrando así alcanzar unos niveles de emisión de 150 mg/Nm3, la mitad de lo que exigirá la AAI en 2010, frente a los valores anteriores del orden de 400 mg/Nm3.