Rajoy dice que trabajará por una nación "de ciudadanos libres e iguales" y defenderá la bandera como Otaola en Lizartza

Actualizado: sábado, 8 septiembre 2007 16:08

MARBELLA (MÁLAGA), 8 Sep. (EUROPA PRESS) -

El presidente del PP, Mariano Rajoy, aseguró hoy que, de ganar las próximas elecciones generales, trabajará desde el Gobierno para que España sea "una nación de ciudadanos libres e iguales en la que el bienestar mejore constantemente", al tiempo que destacó que defenderá la bandera española "como hace Regina Otaola en Lizartza", en referencia a la alcaldesa popular de la localidad guipuzcoana.

Rajoy, que participó en Marbella (Málaga) en el acto de celebración de los 100 primeros días de gobierno popular en el municipio, manifestó en su intervención que "quiero y siento la bandera española", y mostró su "profunda admiración por lo que está haciendo la alcaldesa de Lizartza", que ayer izó la bandera española en la balconada del Ayuntamiento.

En este sentido, quiso hacer hincapié en que la bandera "es la de todos, la que nos une y aquella de la que estamos orgullosos", por lo que insistió en que "tiene que ondear en todos los ayuntamientos de España". Incidió por tanto en que él, como gallego, "siento la bandera de Galicia, pero como español siento la bandera de España que me une a millones y millones de compatriotas".

El líder de los populares afirmó, además, que trabajará para defender "la España constitucional, la unidad de la nación, el Estado de las Autonomías, la igualdad de los españoles, y que no haya enfrentamientos entre españoles y comunidades".

Al respecto, resaltó la necesidad de que "las cosas se hagan con seriedad y que esto no se convierta en una subasta continua, a ver quien presiona más y quien tiene mejores medios para conseguir más cosas". Así, consideró que para el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "la nación es un concepto discutido y discutible", matizando que "para mí no, España es una nación de ciudadanos libres e iguales".

NEGOCIACIÓN CON ETA.

Por otro lado, Rajoy calificó de "disparate" la negociación con organizaciones terroristas, ya que, según subrayó, "todo el mundo sabe que una organización terrorista puede hacer daño, pero no le puede ganar la batalla a una nación de más de 44 millones de ciudadanos".

Manifestó que la "única posibilidad" que tiene una organización terrorista para ganar "es que alguien negocie con ellos sus objetivos políticos a cambio de que dejen de matar", motivo por el cual "el PP y el PSOE juntos firmaron un acuerdo de que no se iba a negociar y a pagar ningún precio político a ETA, gobierne quien gobierne", lo que suponía "quitarle la última esperanza de victoria", apuntó.

Lamentó en este sentido que Zapatero "cambió de criterio y se lo advertí", recordando que, por ese motivo, "fuimos criticados hasta la saciedad". "Decían que nos habían dejado solos y era verdad, todo el mundo se apuntó a la frivolidad de Zapatero", aseguró.

Finalmente, el presidente del PP sentenció que "hoy todos sabemos que, al menos, hay un partido político en España que, en las duras y las maduras, defiende principios y convicciones, y que a veces tiene la razón".