MÁLAGA, 2 May. (EUROPA PRESS) -
El dueño de la finca de Alhaurín de la Torre (Málaga), en la que el pasado fin de semana se encontraron dos cadáveres y que está imputado en relación a esas muertes, ha presentado una querella ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) contra el juez de Málaga que tramita la custodia de su hija, a la que, asegura, no ve desde hace meses, tras la muerte de su ex mujer.
Dicho escrito, dirigido contra el magistrado de Primera Instancia número 5 de Málaga, fue registrado en febrero de este año. Fuentes judiciales indicaron que hay unas diligencias indeterminadas, como siempre ocurre, que se encuentran, actualmente, en el trámite de información del fiscal, tras lo que se determinará si sigue o no la tramitación de la querella.
La querella, presentada por su representación legal que se dirige desde el despacho Antiñolo-Davó y asociados, relata la relación que el hombre mantuvo durante 10 años con la que fue su esposa, quien le denunció por malos tratos. En este punto, se indica que el hombre "fue absuelto" de dos delitos, mientras que otras denuncias fueron "rechazadas".
Tras esto, se estableció un régimen de visitas de la hija que tenían en común, que pasaba uno de cada dos fines de semana con el padre "con absoluta normalidad", según el escrito, al que tuvo acceso Europa Press. En él se señala que en abril de 2008 la ex mujer apareció muerta con signos de violencia en la piscina de la casa, investigación que se lleva en un juzgado de Málaga y en la que el querellante "se encuentra libre de cualquier responsabilidad".
Tras dos semanas "desconociendo dónde se hallaba la niña", se le comunicó que estaba con unos amigos de la fallecida, por lo que se presentó un escrito ante el Juzgado de Primera Instancia número 5, por el que se reclamaba, que siendo el padre el único progenitor y ostentando la patria potestad se entregase a la menor al padre, aunque, según la querella, el juez dictó un auto en el que "se suspendió la custodia y se la concedió a la hermana de la difunta".
Se indica en el documento que "el juez dice en ese auto que, tras la exploración de la menor, se deduce que lo más beneficioso para ella es que temporalmente quede en guarda de su tía", algo que no comparten los abogados del padre, que recurrieron dicha resolución, de junio del pasado año.
Además, se pidió también la aplicación del régimen de visitas que tenía el padre, pero lamentan que, aunque desde abril el hombre no ha visto a su hija, el juez "se ha dedicado a sestear sin adoptar medida alguna en provecho de la recomposición de la relación entre el padre y la hija, negándose de forma reiterada a resolver acerca del régimen de visitas", mientras que "toda petición de la parte contraria es resuelta de inmediato".
"Lo que denunciamos es que este juez ni siquiera permite a mi cliente acudir al recurso de alzada, toda vez que, al no resolver acerca de las visitas, mantiene este asunto tras 10 meses en el limbo", añade la querella, en la que se estima, además, que, tras la presentación de este escrito, los procedimiento en los que es parte el querellante "deben ser vistos en otro juzgado" o deben pasar al sustituto en el mismo órgano judicial.
