JAÉN, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -
La provincia de Jaén contará con un séptimo Monumento Natural en el paraje de La Bañizuela, en el municipio de Torredelcampo, una vez que el Consejo de Gobierno andaluz apruebe su catalogación a propuesta de la Delegación Provincial de la Consejería de Medio Ambiente.
En declaraciones a Europa Press, el titular de este departamento, José Castro, explicó que hasta la fecha la provincia cuenta con seis espacios o elementos que poseen este reconocimiento. En concreto, se trata de Los Órganos, en Santa Elena; El Piélago, en Linares y Vilches; el Pinar de Cánovas, en Jimena; el Quejigo del Amo o del Carbón, en Valdepeñas de Jaén; el Olivo de Fuentebuena, en Arroyo del Ojanco, y las Huellas de Dinosaurio, en Santisteban del Puerto.
A ellos se unirá próximamente el Arrayán de La Bañizuela, cuya candidatura ha impulsado por su "importancia y riqueza botánica" la Delegación Provincial con el apoyo tanto del Ayuntamiento torrecampeño como de los propios vecinos. "Es un pequeño bosque de dos hectáreas que está situado muy cerca del núcleo urbano. Posee una enorme biodiversidad con 22 especies de árboles y arbustos y también una gran riqueza de setas", comentó.
Castro destacó que una vez obtenga la catalogación como Monumento Natural por parte del Consejo de Gobierno se iniciará una especial colaboración entre administraciones para proteger y mejorar el espacio, como se ha hecho ya en algunos de los otros elementos, como el Pinar de Cánovas, El Piélago o las Huellas de Dinosaurio.
En este sentido, señaló que, junto a la vigilancia y control por parte de los agentes de Medio Ambiente, la Junta de Andalucía realiza actuaciones encaminadas a su conservación y adecuación para fomentar su disfrute por parte de los ciudadanos. Así, entre otras cosas, se instala señalización informativa, se acondicionan áreas recreativas o se preparan pequeños aparcamientos para facilitar el acceso.
El delegado recordó que los Monumentos Naturales son espacios o elementos de la naturaleza constituidos básicamente por formaciones de notoria singularidad, rareza o belleza, que merecen ser objeto de protección especial.
Además, pueden conseguir esta figura formaciones geológicas, yacimientos paleontológicos y otros elementos de la gea que reúnan un interés especial por la singularidad o importancia de sus valores científicos, culturales o paisajísticos. "Los criterios son muy variados puesto que se viene a reconocer singularidades muy específicas", concluyó.
