JAÉN, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente provincial del PP de Jaén, José Enrique Fernández de Moya, ha considerado que hay una "operación de salvación personal" en la decisión de la presidenta de la Junta de Andalucía y secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, de que los representantes socialistas andaluces que resultasen imputados por el Tribunal Supremo (TS) o el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) tendrían que dejar sus escaños en las cámaras en las que se encuentren.
Así lo ha señalado este lunes a preguntas de los periodistas, ante los que se ha cuestionado si la dirigente socialista ha consultado esa medida con Gaspar Zarrías, Francisco Vallejo, Antonio Ávila y Mar Moreno, exconsejeros jiennenses señalados por la jueza Mercedes Alaya en su investigación sobre el caso de los expedientes de regulación de empleo (ERE) presuntamente fraudulentos.
"Me da la impresión de que la señora Díaz ha ido por libre y ha creado una profunda división interna en el seno de su partido, máxime cuando el sábado un medio regional publicaba que todavía mantiene como altos cargos en la Junta o militantes del partido a personas imputadas a las que no les ha pedido ni el cese en el desempeño de su trabajo ni las ha expulsado del partido", ha afirmado.
Tras apuntar que no se han pronunciado al respecto, como tampoco los expresidentes Manuel Chavez y José Antonio Griñán, ha considerado que la presidenta de la Junta "ha enseñado la puerta de salida" a sus antecesores en lo que ha calificado como "una pose" en "una operación de salvación personal caiga quien caiga".
"Si estuvieran a favor, lo lógico es que hubieran salido a defender la propuesta, creo que les ha sentado muy mal", ha manifestado Fernández de Moya, para el que también "sería muy bueno" conocer la opinión de la presidenta del PSOE a nivel federal, la jiennense Micaela Navarro, al tiempo que ha recordado que el secretario general del partido, Pedro Sánchez, "tampoco ha dicho ni media".
