SEVILLA, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
Fuerte Group Hotels ha reciclado en 2017 un total de 95.193 kilos de residuos sólidos urbanos, según la Memoria de Responsabilidad Social Corporativa relativa al ejercicio 2017, que precisa que desde 2013 hasta el pasado ejercicio, el grupo andaluz, que se ha consolidado como una de las cadenas más sostenibles de nuestro país, ha logrado reducir su huella de carbono un 22,12 por ciento.
Según indica la empresa en una nota, Fuerte Group Hotels acaba de hacer pública la Memoria de Responsabilidad Social Corporativa relativa al ejercicio 2017, el año de su 60 aniversario, y en ella se confirma por qué el grupo andaluz "se ha consolidado como una de las cadenas hoteleras más sostenibles de nuestro país".
De esta forma, además de reciclar el año pasado un total de 95.193 kilos de residuos sólidos urbanos, y 7.780 litros de aceite vegetal; y de participar en proyectos medioambientales como la recuperación de una parcela de un pinsapar en peligro de extinción en la Sierra de las Nieves (Málaga), entre otros, en los últimos cinco años (desde 2013 hasta 2017) la compañía y todos sus hoteles han logrado reducir la huella de carbono un 22,12 por ciento.
Otro de los aspectos por los que la empresa destaca más es por su contribución social, tanto a nivel de sus propios empleados como en lo que respecta a la sociedad en general. Así, en 2017 Fuerte Group Hotels invirtió 148.365 euros en la formación de 853 empleados, lo que supone un aumento del seis por ciento respecto al año anterior, y 124.334 euros en distintas ayudas destinadas a este colectivo, como adelantos, préstamos y ayudas para libros escolares y guarderías, un 30 por ciento más que en 2016; además de canalizar 86.856 euros a proyectos sociales a través de la Fundación Fuerte.
Los proveedores locales también se han visto beneficiados directa e indirectamente por el negocio de la cadena, ya que ésta ha invertido en ellos 1.587.905 euros, un 0,63% más que el año anterior. A esto hay que añadir que el 67% de los trabajadores de los hoteles vive en la zona donde éstos están ubicados.
Gracias a ese cuidado, que forma parte del lema de la compañía 'Cuidamos de las personas y del medio ambiente', en 2017 el 82,46 por ciento de su plantilla, integrada por una media de 612 personas, se mostró satisfecha con su puesto de trabajo; una satisfacción que también dijo sentir el 90 por ciento de los clientes de la cadena, cuya procedencia fue muy variada.
Así, los alemanes fueron líderes con un 31,49%; tras ellos fueron los españoles, con un 25,07%; el mercado británico, con un 11,33% y a continuación se situaron los Países Bajos, con un 4,59%; el mercado belga, con un 3,82%, y el irlandés y el francés, con un 3,61% y un 2,18%, respectivamente. De procedencia nacional, cerca de un 19,61% fueron de Madrid; el 12,10%, de la provincia andaluza de Sevilla, y el 11,06%, de la de Málaga.
En cuanto a la operación, en 2017 el porcentaje medio de ocupación de los seis hoteles y el complejo de apartamentos en régimen de alquiler con los que cuenta el grupo fue de un 79,59%. La incorporación de nuevos servicios a los hoteles permitió la contratación de un 10,2% más de empleados que en 2016, llegando a alcanzarse en el mes de agosto la cifra récord de 900 trabajadores.
Según el director general de Fuerte Group Hotels, José Luque García, "para que los próximos ejercicios sean tan beneficiosos como el de 2017 tendremos que ser realmente competitivos. En Fuerte Group Hotels ya hemos empezado a trabajar al respecto y, además de mejorar nuestras instalaciones, desarrollando servicios más personalizados y segmentados por tipología de clientes, hemos aumentado un seis por ciento nuestro presupuesto de formación, ya que tenemos muy claro que no queremos dejar escapar el talento que tenemos en la compañía".
"Al final, nuestros clientes, que un año más han mostrado unos elevados índices de satisfacción, se acuerdan más de las personas que incluso de las propias instalaciones. Y es que el turismo es eso, una industria de personas que prestan servicios a otras personas", ha añadido Luque.
Éste considera que "para que funcione necesitamos estar todos en la misma línea, las empresas privadas y las instituciones públicas, mejorando la calidad, vendiendo experiencias más allá de los simples viajes, evitando la masificación de los destinos, siendo flexibles a la demanda, impulsando la formación, garantizando el respeto al medio ambiente y jugando todos con las mismas reglas, los hoteleros pero también el alquiler vacacional".
