JAÉN, 25 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino ha dado el visto bueno a la modernización de los regadíos del sector V de las Vegas Altas, con una superficie de 585 hectáreas en los municipios jiennenses de Santo Tomé y Cazorla, al determinar que este proyecto no tendrá que someterse a evaluación de impacto ambiental.
La Subdelegación del Gobierno en Jaén informó en un comunicado de que la Secretaría de Estado de Cambio Climático del citado Ministerio ha adoptado esta decisión al considerar que las medidas previstas en la realización de las obras por el promotor del proyecto, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, evitarán impactos adversos significativos.
La resolución, que se publica en el Boletín Oficial del Estado (BOE) de hoy, señala que entre las medidas que se acometerán para evitar afecciones en la fauna y la flora se encuentran la planificación de las obras para evitar que coincidan con los periodos de cría de la avifauna, la inspección de la zona por personal especializado para identificar la fauna protegida, la vigilancia de las obras para evitar ahogamientos y atropamientos y la instalación de compuertas y rejillas para evitar el paso de animales a las infraestructuras de captación.
Asimismo, el proyecto contempla la especial protección de la vegetación de ribera y de los cursos de agua superficiales y subterráneos, así como la restauración ambiental y paisajística de todas las zonas afectadas por las obras con vegetación autóctona.
Por otra parte, el proyecto va a generar un ahorro de agua que no será utilizado para las explotaciones agrarias, sino que deberá revertir en una mejora de las condiciones ecológicas de los cauces de los ríos. Además, está previsto un control y seguimiento de la calidad de las aguas superficiales y subterráneas.
Prevé la modernización del actual sistema de riego a pie, que será sustituido por un sistema de riego a presión localizado y por aspersión de última generación. Las obras incluyen la construcción de una balsa de decantación de 5.000 metros cúbicos y otra de regulación de 31.182 metros cúbicos, además de la instalación de una red de distribución de tuberías enterradas, con una longitud total de unos 40 kilómetros, que sustituirán a las acequias existentes de hormigón armado, que serán eliminadas, y dos estaciones de bombeo.
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