ÚBEDA (JAÉN), 19 Ago. (EUROPA PRESS) -
Transformar el agua en música a través del palmoteo es el espectáculo único que ofrece la formación cultural Water Music que, con sus 'Mujeres del Agua', trae hasta Úbeda y Baeza una actuación llena de magia y belleza que hunde sus raíces en las danzas tribales ancestrales de Vanuatu, un pequeño país integrado por islas en el Pacífico Sur.
El Ayuntamiento de Úbeda colabora con la Delegación de la Comisión Europea en Vanuatu y el Gobierno de España que patrocinan la visita de esta formación integrada por diez mujeres y dos hombres, que han representado a su país, Vanuatu, en la Expo de Zaragoza.
La concejal delegada de Cultura, Elena Rodríguez, resaltó en un comunicado el éxito de este espectáculo, que tras su paso por Zaragoza, representando a su país en el día dedicado a las Islas del Pacífico, sólo se podrá ver en Úbeda y Baeza". También recordó que la entrada es gratuita y animó a la ciudadanía a que "asista y aproveche esta oportunidad única de conocer otras culturas del mundo".
Los integrantes de Water Music son originarios de la isla de Gaua, en el norte del país, y constituyen una expresión cultural única, ya que utilizan el sólo palmoteo sobre el agua durante sus representaciones. Vestidas de manera tradicional, con poco más que una falda de hojas, las mujeres entran en el agua y sólo parecen sobresalir los collares de flores que llevan en la cintura y en los brazos.
Con sólo sus manos baten acompasadas la superficie del agua durante el tiempo que dura cada composición, que se traduce en una leyenda. A través de una danza introductoria, algunas de estas leyendas nos hablan de cómo los delfines respiran en la superficie del mar, las libélulas se sientan en el agua o los patos se balancean al compás del agua antes de echarse a volar de nuevo.
Las Mujeres del Agua actuarán en Úbeda mañana, el próximo viernes 22 y el martes 26. Todas las actuaciones serán en el Parque Norte y darán comienzo a las 21.30 horas. Por su parte, en Baeza, el espectáculo se desarrollará el domingo 23 en el Paseo de la Constitución y a la misma hora.
Cada composición tiene una duración aproximada de unos tres minutos --el espectáculo completo es de unos 55 minutos-- y en ella se perciben las diferentes modulaciones ocasionadas en el agua y se distinguen las notas como en cualquier instrumento de percusión, manteniendo la tradición de una isla en la que no existen vehículos a motor y donde la electricidad sería desconocida si no fuera por los pequeños generadores o algunas placas solares recientemente instaladas.
