Una profesional señala que la empleada fallecida sabía que no podía llevar prendas sueltas

Actualizado: martes, 6 abril 2010 16:19

CÓRDOBA, 6 Abr. (EUROPA PRESS) -

La técnica en Prevención de Riesgos Laborales que hizo en marzo de 2007 un estudio sobre la empresa en la que murió una empleada asfixiada después de que su bufanda se quedara atrapada en una máquina afirmó hoy que los trabajadores estaban enterados de que no podían llevar prendas sueltas.

Durante la celebración de la vista oral en Córdoba, en la que el acusado, encargado principal, no quiso hacer ninguna declaración, la testigo manifestó que en relación a otras visitas de empresas que ha hecho, la situación de la lavandería industrial, donde ocurrieron los hechos, era bastante buena y los trabajadores llevaban uniforme.

Por su parte, un empleado de la empresa, que vio cómo ocurrió el suceso el 11 de diciembre de 2007, manifestó que la mujer "nunca se ponía la ropa que le ofrecía la lavandería", sino que traía una bata de su casa y ese día decidió dejarse la bufanda puesta para que no se le olvidara en el trabajo, como le había ocurrido en la jornada anterior.

Asimismo, aseguró que cuando vio a la víctima atrapada con la máquina le dio a todos los botones de emergencia y ella cayó al suelo ya sin vida. Igualmente, afirmó que "todos los trabajadores estaban enterados de que no se podían vestir determinadas prendas" y que incluso él le advirtió a ella que se tenía que quitar la bufanda.

Otra trabajadora también señaló que cuando comenzó a trabajar en esta empresa le explicaron cómo funcionaba la maquinaria, mientras que otra de ellas apuntó que en el mes que estuvo trabajando en este lugar antes de los hechos no recibió ningún curso de riesgos laborales.

No obstante, otras dos jóvenes que también estuvieron como empleadas en la lavandería un tiempo antes del suceso manifestaron que ellas han trabajado en este lugar en varias ocasiones con bufandas y guantes porque allí "hacía mucho frío en invierno" y que nunca les ofrecieron cursos de formación.

Finalmente, un perito consideró que el empresario tendría que obligar al trabajador a no usar determinadas prendas, mientras que otro técnico en prevención de riesgos laborales determinó que la utilización de ropa no adecuada fue la causa del accidente, ya que la máquina estaba en "perfecto estado".