La finalista del Planeta, Marta Rivera de la Cruz, dice que su libro "es una exploración del dolor de la forma más optimista posible"
SEVILLA, 21 Nov. (EUROPA PRESS) -
El escritor Alvaro Pombo (Santander, 1939) presentó hoy en Sevilla su obra 'La fortuna de Matilda Turpin', ganadora del prestigioso Premio Planeta 2006, dotado con 601.000 euros, de la que dijo es su "mejor" texto literario, "el más completo hasta el momento".
En rueda de prensa, Pombo explicó que decidió presentar este trabajo a dicho certamen, "que esconde todo tipo de tentaciones", tanto por motivos económicos como por la "buena y animosa" promoción que recibe la obra, algo que, según indicó, "me hace pensar que será será leída por mucha gente".
El escritor sostuvo que su obra, que describe un ambiente de conflictividad familiar sobre el que reina la muerte de Matilda, "tiene un marcado tono de drama que refleja la problemática de las jóvenes parejas de nuestros días", al tiempo que ahonda en que "el dinero es la fuerza creadora y el sistema simbólico más importante que tiene el hombre junto con el lenguaje, ya que permite comprender el mundo en el que vivimos".
Por otro lado, Pombo precisó que durante el proceso de elaboración de un libro, el autor siempre cuenta con una "copresencia" del lector. No obstante, matizó que "no se puede escribir teniendo demasiado presente a los lectores porque, en ese caso, salen obras por encargo".
FINALISTA PREMIO PLANETA
La finalista del Premio Planeta 2006, Marta Rivera de la Cruz (Lugo, 1970), que recibió 150.250 euros por su obra 'En tiempo de prodigios', aseguró que este trabajo se basa en "dos líneas argumentales muy diferentes, pero unidas por un denominador común, que es la amistad en sus diferentes concepciones".
Igualmente, la escritora resaltó a lo largo de las más de 500 páginas de esta obra, el lector encontrará "una exploración del dolor de la forma más optimista posible y el pensamiento de que hay que celebrar la vida, a pesar de la muerte".
En este sentido, dijo haber utilizado el dolor como un aprendizaje, ya que, a su juicio, "uno no se hace adulto hasta que no pasa por una experiencia como la muerte, que además enriquece tu relación con los demás".
Rivera de la Cruz, coincidiendo con Pombo, también dijo estar segura de encontrarse ante su mejor obra. "Llevaba cuatro años sin escribir ficción, por lo que cuando la comencé, tenía un poco de miedo a estar engrasada, sin embargo la novela salió sola y en nueve meses la tenía lista".
Acerca de la obra ganadora del Planeta, la finalista, que confesó haberla leído, mientras que Combo se disculpó por no haber hecho lo propio, consideró que ésta "tiene una construcción impecable con páginas redondas, que a cualquier autor nos produce envidia".
