Arenas afirma que tiene "hambre de gobierno", anunciando un paquete de medidas de un futuro Ejecutivo del PP

Actualizado: sábado, 7 octubre 2006 15:43

Se compromete a no estar más de ocho años como presidente de la Junta y anuncia la creación de tres nuevas consejerías

MALAGA, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -

El presidente del PP-A, Javier Arenas, protagonizó hoy, en la Convención Regional del partido que se celebra en Málaga bajo el lema 'Queremos lo mismo que tú, una Andalucía de primera', su propio "debate de investidura", al anunciar un paquete de medidas de un futuro Ejecutivo popular en la Junta, al tiempo que manifestó que tiene "hambre de gobierno", que no es "lo mismo que de poder". Dijo que cuando sea presidente de la Junta, no estará más de ocho años en el cargo.

Arenas, que inauguró el primer foro de la convención regional, dedicado a las 'Medidas del cambio', quiso dejar claro que su objetivo es ganar las próximas elecciones municipales, no simplemente subir tres o cinco escaños, afirmando que si al PP se le da la oportunidad de gobernar, su objetivo será hacer de Andalucía la tierra más próspera de España y de la Unión Europea. Además, su "hambre de gobierno", según apuntó, no es lo mismo que "hambre de poder", ya que gobernar consiste en levantarse todas las mañanas con la "obsesión" de hacer reformas para mejorar el bienestar colectivo de los andaluces.

Arenas, que está dispuesto a dejarse la "piel en el camino" para ganar las elecciones, indicó que sus mejores aliados a la hora de defender la posible victoria en las elecciones autonómicas de 2008 son las 150 alcaldías que tiene el PP en Andalucía. Se comprometió a que si llega a la Presidencia de la Junta, será como un "alcalde" de toda Andalucía, dedicando las 24 horas del día a oír a los ciudadanos.

Para afrontar el camino hacia la Presidencia de la Junta, Arenas quiere contar, además de con los afiliados y militantes del PP, con independientes, con gente que era de la izquierda y ahora no lo es e incluso con personas que siguen teniendo esa ideología, pero que son democráticas y piensan que en Andalucía "urge un cambio por salud democrática".

En cuanto llegue al Gobierno andaluz, Arenas hará una profunda reestructuración del mismo, definiendo tres grandes áreas, como son la política, la económica y la social. Además de la ya anunciada Consejería de Inmigración y Cooperación, creará otras dos nuevas, la de Agua y la de la Familia, la cual servirá para ayudar a todas las familias andaluzas y no para estar todos los días pensando en "como favorecer a tú familia", según apuntó.

También planteará, según afirmó, un decálogo para regenerar la vida política en Andalucía y fomentar el debate político, algo que quiere que sea objeto de un pacto entre todos los partidos políticos, porque, actualmente, la calidad de la democracia en la comunidad está "bajo mínimos y el debate político andaluz está dormido". Otro de sus compromisos, en este caso personal, es no estar más de ocho años en la Presidencia de la Junta (dos legislaturas) y que nunca más vuelvan a coincidir las elecciones autonómicas con las generales.

En cuanto al transfuguismo, se comprometió a reunir a los otros partidos para firmar, incluso bajo notario, que no se llevarán tránsfugas en las listas electorales. Asimismo, señaló que los medios públicos de comunicación ya no dependerían del Gobierno autonómico, sino del Parlamento, al tiempo que apuntó que posibilitará que en los centros educativos estén presentes todos los periódicos de máxima difusión en la comunidad a disposición de los ciudadanos y no sólo aquellos "que le gustan" al Gobierno.

En materia de empresas públicas, Arenas quiere, en su futuro gobierno, que los directivos, especialmente aquellos de la Radio Televisión de Andalucía (RTVA), no puedan contratar con las empresas a las que han pertenecido hasta diez años más tarde de haber dejado el cargo. Sobre las cajas de ahorros, manifestó que su intención es que no condonen ni financien a los partidos ni que ningún cargo público electo pueda pertenecer a sus consejos de administración.

MEDIDAS EN EL PARLAMENTO

También quiere que se tomen medidas en el ámbito del Parlamento andaluz, en el sentido de que se pueda crear una comisión de investigación de manera automática si lo piden un tercio de los diputados o al menos dos grupos parlamentarios y que los consejeros que no respondan a las iniciativas por escrito sean reprobados por la Presidencia de la Cámara.

Otras medidas de Arenas al frente de un Gobierno del PP serían una reforma de la administración pública, con reducción de cargos, y acabar con el centralismo de la Junta en Sevilla para que sean potentes las ocho provincias. También acometería un plan de austeridad presupuestaria para recortar el gasto corriente, al tiempo que la educación y la inmigración serían las "dos estrellas" del presupuesto de la comunidad en cuanto a partidas.

Otros objetivos de Arenas al frente de la Junta, serían cambiar los controles en materia urbanística, mejorar la seguridad ciudadana, con un incremento de efectivos y con el impulso de la Policía Autonómica, así como defender desde Andalucía una política común con la Unión Europea en materia de inmigración, ya que este asunto no se puede abordar desde la "demagogia y la irresponsabilidad", como es hacer "papeles para todos".

Además, Javier Arenas, que se propuso no nombrar al presidente de la Junta, Manuel Chaves, durante su discurso, quiere promover un pacto con los otros partidos para defender los intereses de Andalucía en la Unión Europea, en materia de financiación autonómica, en relación con el pacto local y sobre la reforma del Estatuto de Autonomía.

En su opinión, todas estas medidas suponen una oportunidad para pasar de "lo antiguo a lo nuevo" y del "conformismo a la ambición". Su objetivo, según insistió, es hacer realidad la alternancia en Andalucía, ante lo que no cabe, según advirtió a sus compañeros de partido, el "llanto y la queja", sino echar mucha "inteligencia, corazón y esfuerzo", así como ir de pueblo en pueblo, de persona a persona y presentar a los mejores candidatos de cara a las elecciones municipales de 2007.

Consiente de que el PP no compite "en igualdad de condiciones frente al PSOE", que "abusa" todos los días de los medios de comunicación públicos y de la publicidad institucional, Arenas dijo que quiere un Gobierno andaluz que sea "respetado y no temido por nadie" y que cuide de la libertad individual de cada uno de los andaluces. Andalucía, según dijo, "no es propiedad de nadie, sino que es de todos" y apuntó que quiere articular el proyecto "más reformista y participativo" que jamás haya existido.