Uno de cada veinte intentos de suicidio en España se consuma, según expertos psiquiatras

Actualizado: martes, 17 octubre 2006 21:24

SEVILLA, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -

Uno de cada veinte intentos de suicidio en España se consuma, siendo la depresión, los trastornos bipolares y la esquizofrenia los problemas mentales que se asocian más a menudo con estos comportamientos suicidas, al igual que el abuso de drogas y alcohol, según apuntó hoy en una nota el comité organizador del X Congreso Nacional de Psiquitría, que se está celebrando durante estos días en Sevilla.

Según estos expertos, en la mayoría de los países occidentales cerca del 90 por ciento de personas que mueren por suicidio sufrían un problema mental. Además, apuntaron a los acontecimientos estresantes como las rupturas, la pérdida de seres queridos, los conflictos con los allegados y amigos o los problemas legales y financieros, entre las causas que pueden provocar tentativas de suicidio.

Indicaron que los comportamientos suicidas constituyen uno de los problemas de salud pública más importantes de todos los países y que, de acuerdo con las estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), durante el año 2000 aproximadamente un millón de personas falleció en el mundo por suicidio, multiplicándose por veinte el número de tentativas suicidas.

Por otra parte, advirtieron que el suicidio en adolescentes en los países occidentales figura entre las primeras causas de muerte en adolescentes. Por ello, reconocieron que durante los últimos años se ha cuestionado el uso de determinados antidepresivos en los grupos de edad más jóvenes por su potencial facilitación de este tipo de comportamientos. De esta forma, señalaron que uno de los objetivos del simposio organizado en el marco del X Congreso Nacional de Psiquiatría es el de ahondar en el conocimiento de la etiología de los comportamientos suicidas, así como revisar el estado actual de las estrategias terapéuticas de tipo farmacológico disponibles y consensuadas para este tipo de comportamientos. Añadieron que los contextos socioeconómicos, educacionales y sociales pobres, así como de una débil salud física, son igualmente asociados a comportamientos suicidas. Así, destacaron que un mayor conocimiento de estos factores de riesgo podrían ayudar a identificar mejor las personas con más riesgo de suicidio, con el fin de implantar programas de prevención más focalizados para quienes más lo necesitan.