SEVILLA, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
Según los datos que maneja la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO de Andalucía (FSS-CCOO Andalucía), únicamente el 5,5 por ciento del personal residente en formación que ha finalizado su período de residencia a finales de mayo sigue prestando sus servicios como especialista en el Servicio Andaluz de Salud (SAS), por lo que el resto tendrá que emigrar, trabajar en centros privados, realizar otra especialidad o engrosar la lista del paro. Esta organización sindical advierte que esta cifra es aún menor al 9,16 por ciento del colectivo de profesionales que continuó en el año 2013
A finales del mes de mayo de 2014, de un total de 1.006 especialistas internos residentes (EIR) que finalizaron su residencia en los diversos centros del Servicio Andaluz de Salud, sólo 56 profesionales continúan prestando sus servicios en el SAS, es decir, un 5,5 por ciento, lo que supone una cifra aún menor que los 85 profesionales que siguieron en el año 2013 (un 9,16 por ciento).
"Si tenemos en cuenta que antes de la crisis económica el número de EIR que permanecía en el Sistema Sanitario Público de Andalucía ascendía al 78 por ciento, es evidente el deterioro que se está produciendo en la prestación sanitaria al expulsar a un personal con una alta cualificación técnica y científica", mantiene el secretario general de la FSS-CCOO Andalucía, Humberto Muñoz, que recuerda además que su formación ha supuesto al erario público un coste medio de 168.000 euros por profesional, es decir, 169 millones de euros para el conjunto de la promoción que ha terminado su periodo de formación en 2014.
La FSS-CCOO Andalucía denuncia también que las salidas que le quedan a este personal son emigrar fuera de Andalucía, trabajar en centros privados, volver a realizar un nuevo período de residencia en otra especialidad o engrosar la lista del paro. "Esta falta de oportunidades para un colectivo estratégico para la sociedad andaluza corre paralela a la política complaciente de la Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía, que se limita a observar pasivamente este éxodo de profesionales jóvenes y altamente cualificados de los centros sanitarios del SAS", asegura el dirigente sindical.
Así, esta organización sindical exige a la Junta de Andalucía un plan de choque que incluya una "lucha enérgica" contra la tasa de reposición de personal del 10 por ciento impuesta por el Gobierno estatal, que busca el deterioro de los servicios públicos sanitarios para favorecer a la iniciativa privada.
Asimismo, denuncia que el SAS ha perdido una nueva oportunidad al no establecer en su recientemente publicado Plan de Ordenación de Recursos Humanos la eliminación de la posibilidad de prolongar la edad de jubilación de los directivos, cargos intermedios y facultativos sanitarios más allá de los 65 años, dado que, lejos de ser una situación excepcional ante una falta coyuntural de especialistas, se ha convertido en una medida de carácter permanente que impide la entrada de estos profesionales que terminan su formación y deben seguir actualizándola con el ejercicio de su especialidad.
