SEVILLA, 14 Abr. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Organización del PSOE de Sevilla, José Muñoz, ha preguntado este lunes, retóricamente, "dónde se han metido estos señores del PP que llevan semanas preguntando por responsabilidades en otros partidos, que pretenden dar ejemplos, y que se han apresurado a esconderse sobre las muy serias acusaciones de su propio tesorero sobre una caja B en el Partido Popular de Sevilla", en relación a la declaración de Luis Bárcenas del pasado viernes.
Para Muñoz, es "altamente improbable que ningún dirigente popular esté a la altura de la alcaldesa de Gerena", Margarita Gutiérrez (PSOE), quien ha anunciado su renuncia a la Alcaldía tras ser condenada a ocho años de inhabilitación para empleo o cargo público por un delito contra la ordenación del territorio, a través de una sentencia susceptible de recurso. "El ejemplo es el de Juan Bueno, presidente del PP de Sevilla, que prefiere irse de gira por Europa antes de hablar en público sobre una acusación muy grave, sobre la que prefiere no decir nada que le pueda comprometer. O como también es el caso de Virginia Pérez, "que dispara hacia cualquier sitio con tal de que desviar la atención sobre la relación familiar de su cuñado, Ricardo Tarno, con la trama de la Gürtel, y con el entorno de Javier Arenas. Oportunidades ha tenido desde que se hizo público el informe de la Guardia Civil, pero es preferible distraer la atención a asumir responsabilidades".
"Llevan dos días de retraso para responder ante una acusación muy grave que viene desde dentro. En Andalucía se suele decir que el que calla, otorga. Pero entendemos que tengan cosas que callar, porque igual que hay en Génova unos papeles de Bárcenas en los que recogen los sobresueldos de Arenas y de Moreno Bonilla presuntamente, habría que ver si es cierto que existían pagos en la provincia de Sevilla, y cuáles fueron los orígenes de esos fondos", añade José Muñoz.
Para los socialistas, no resulta novedosa "esta doble moral", pues como ha quedado manifiesto, "son los populares los primeros que han maldecido el bipartito, y los que se han ofrecido corriendo a sustituir a Izquierda Unida bajo la presidencia de Susana Díaz". Una situación normal "porque es complicado que les entre en la cabeza cualquier situación que esté relacionada con el diálogo y no con la orden directa desde Génova o desde Suiza", pero sobre todo, "porque como no tienen ningún tipo de ética, ni argumentos políticos, les queda la demagogia y los comunicados de prensa".
