ZARAGOZA, 1 Abr. (EUROPA PRESS) -

La familia Bellvis homenajeó esta tarde al abuelo de esta saga de empresarios industriales, Emilio Bellvis Montesano, quien patentó en 1958 la fregona y revolucionó el mundo de la limpieza del hogar.

En declaraciones a los medios de comunicación, el nieto del Emilio Bellvis, Manuel, dijo que "para nosotros, este es un acto muy importante", ya que 2008 es un año "muy importante" para Zaragoza por celebrarse la Exposición Internacional Zaragoza 2008 y ser el quincuagésimo (50) aniversario de la patente de la fregona. "Damos gracias por estar aquí con los amigos y la gente de la tierra", dijo Manuel Bellvis.

Durante 50 años la filosofía de empresa de las sucesivas generaciones "ha sido la misma" y consiste en trabajar "desde Aragón hacia el resto de España", aumentar las divisiones de trabajo y ampliar, actualmente, los procesos de investigación, desarrollo e innovación (I+D+i), que es "lo que hoy en día te distingue del resto".

En la actualidad, el reto más importante de la famila Bellvis es "modernizar el sistema y pasar a fregar todos con agua limpia", innovando la ya tradicional tecnología de la fregona.

De Emilio Bellvis, su nieto Manuel recordó esta tarde "la sencillez, la humildad, cómo trabajaba y el estar en la sombra". Emilio Bellvis falleció en 1993 "y estoy seguro de que hoy, desde el Cielo, nos está viendo y estará orgulloso de su reconocimiento".

HOMENAJE.

Al acto de homenaje asistió el consejero de Economía del Gobierno de Aragón, Alberto Larraz, ya que el jefe del Ejecutivo autónomo, Marcelino Iglesias, no pudo acudir por encontrarse en Navarra participando en el entierro de su compañero de partido y secretario general de los socialistas navarros, Carlos Chivite, fallecido ayer en Pamplona.

También asistió el presidente de Cajalón, Bruno Catalán, en cuya sede de Zaragoza se celebró el homenaje, así como numerosos empresarios y representantes políticos y de la sociedad zaragozana.

Emilio Bellvis presentó hace medio siglo en el Registro de la propiedad un nuevo ingenio consistente en un palo con fibras absorbentes en un extremo y un cubo para escurrir el agua.

Este utensilio de limpieza, que permitía fregar los suelos de pie, supuso una revolución laboral y social, especialmente entre las mujeres, que entonces realizaban en exclusiva las tareas domésticas. La fregona palió los dolores de espalda y de las articulaciones, ya que hasta entonces se fregaba de rodillas. También ayudó a madurar el concepto de higiene, ya que no se ceñía sólo al ámbito doméstico, sino que pasaba también al profesional.

La fregona ha experimentado durante estos 50 años una importante evolución, puesto que primero estuvo formada por una mopa plana, con rodillos de madera y un pedal para escurrir el mocho, hasta que Emilio Bellvis la mejoró para alcanzar la fregona redonda que hoy se conoce. Atrás quedaron los cubos de metal, que dieron paso a los de inyección de plástico, con escurridor cónico incluido.

Hoy, la empresa Embell, que fundó Emilio Bellvis y que gestiona la tercera generación familiar, ha apostado por otro utensilio renovador, como es el cubo que friega siempre con agua limpia. El ahorro de agua, el respeto al medio ambiente y la eficacia del trabajo son las principales ventajas de este cubo del siglo XXI, en el que se emplea la mitad de agua. Con esta nueva tecnología cada hogar de tamaño medio ahorrará en agua el equivalente a dos piscinas olímpicas.

EL FUNDADOR.

Emilio Bellvis nació en Zaragoza el 25 de abril de 1914 en el seno de una familia de inventores, ya que su padre, Camilo Bellvis, fue el primer fabricante de la ola express en España.

En 1940 comenzó a trabajar en el Ejército del Aire, donde era responsable del Departamento de Reparación y Mantenimiento de la Base Áerea de Valenzuela. Su vocación y disposición le hicieron merecedor de la Cruz al Mérito con distintivo blanco del Ministerio del Aire en 1943.

Es en esta época cuando comenzó a aprovechar los bancos y tornos de trabajo del negocio familiar, una tienda de recambios de automóviles en la que nació la empresa Rodex y donde comenzaron a fabricarse los primeros friegasuelos de rodillos.

Finalmente, fueron su espíritu creativo y su afán de superación los que le llevaron a lanzar su idea y patentar la esencia de la fregona actual, que durante tanto tiempo había estado diseñando y perfeccionando.

En 1958 presentó el invento en el Registro de la Propiedad Industrial. Entonces no era consciente de la repercusión mundial que alcanzaría su creación, un sistema barato y sencillo que revolucionó todauna época por sus incontables ventajas. Emilio Bellvis falleció en Zaragoza el 11 de noviembre de 1993, a los 79 años.

No obstante, el zaragozano Manuel Jalón afirmó ser, a través de una nota de prensa, el verdadero inventor de la fregona. Jalón ha llevado a los tribunales al hijo y el nieto de Emilio Bellvis y, actualmente, hay una causa abierta en el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Zaragoza.