ÉPILA (ZARAGOZA), 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Federación para el Desarrollo Integral de Valdejalón y Campo de Cariñena (FEDIVALCA), en colaboración con el Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA), demuestra a los agricultores de estas zonas de la provincia de Zaragoza las ventajas de cultivar plantas aromáticas y medicinales, a través de un proyecto piloto que se desarrolla en los campos de Épila.
La gerente de FEDIVALCA, Trinidad Usón, explicó en declaraciones a Europa Press que este proyecto surgió "hace varios años, cuando comenzamos un curso para informar a los agricultores sobre las alternativas que existían a los cultivos tradicionales", centrándose en los cultivos y dejando a un lado "las propiedades" y beneficios que causan posteriormente las plantas.
Así, "se hizo una plantación piloto en la Comarca de Valdejalón, tanto en regadío, con variedades como la melisa, como en secano, con tomillo figis, tomillo vulgar francés y salvia, entre otras plantas. Se cultivaron 3.000 metros cuadrados de regadío y 6.000 de secano, en el término municipal de Épila. De cada mil metros de terreno, "se recogieron 460 kilos", apuntó.
El objetivo de esta experiencia era "ver si estos cultivos podían ser rentables para la zona o no" y la conclusión que se obtuvo, "según nuestros datos, es que sí que lo son, especialmente la melisa, porque es una planta invasora, sin enfermedades y fácil de tratar", ya que no requiere "de abonos ni de un tratamiento especial", detalló Usón.
La gerente de FEDIVALCA aseguró que los agricultores de estas dos comarcas recibieron su propuesta "mejor de lo que esperábamos y ahora hay personas interesadas en poner estos cultivos por sí mismos, porque se han convencido de que son una alternativa a los actuales y que, además, son más ecológicos".
VENTAJAS E INCONVENIENTES
Uno de los agricultores que participó en el curso organizado por FEDIVALCA y que se implicó en el proyecto posterior, Raúl Lorente, aseguró que esta experiencia "ha estado bien", ya que ha servido para que "conozcamos un cultivo que no conocíamos y que podría tener enfoque en esta zona" de pequeñas parcelas.
En declaraciones a Europa Press, Raúl Lorente señaló que las plantas medicinales, en concreto la melisa, son cultivos "prácticamente manuales e intensivos" que, aunque no son adecuados para grandes producciones, "sí podrían encajar en esta zona, e incluso en terrenos de secano".
Entre sus ventajas, "este cultivo no necesita de grandes inversiones en maquinaria ni infraestructuras" y las parafarmacias están dispuestas a comprarlo. Respecto a los inconvenientes, el primero de ellos sería que "es una cosa tan sumamente nueva que no existen redes en las que te puedas apoyar, es un camino por abrir", señaló.
En estos momentos, tras participar en el proyecto piloto de FEDIVALCA, "estoy valorando cultivar estas plantas por mí mismo, estoy animado para ello aunque quizás me retiene un poco que estamos sobrecargados de trabajo", concluyó.
