ZARAGOZA, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -

Apenas hace dos décadas del desarrollo de la nanotecnología, por lo que todavía no se han sentado las bases científicas y tecnológicas necesarias para garantizar el uso seguro de materiales nanoestruturados de este tipo de tecnología, dedicada al control y manipulación de la materia a la escala del nanómetro: la mil millonésima parte de un metro.

Son conocidas sus aplicaciones en el campo biomédico, energético o industrial. Pero hasta ahora poco se ha investigado en materia de seguridad. Sólo hay estudios para determinar la toxicidad en cultivos celulares y animales de laboratorio, sin abordar el riesgo que entraña la seguridad e higiene para los investigadores que trabajan en este campo. Un grupo de investigación del Instituto de Nanociencia de Aragón (INA) reconocido como de excelencia investigadora por el Gobierno de Aragón participa en un proyecto nacional (Nanosost), con el fin de avanzar en la manipulación y tratamiento sin riesgos de las nanopartículas diseñadas para diferentes aplicaciones biomédicas y tecnológicas.

Se trata del grupo "Películas y Partículas Nanoporosas" (NFP), dirigido por el científico Jesús Santamaría, quien precisa la importancia de "determinar hasta dónde nos está poniendo en riesgo la investigación en nanotecnología".

CONSORCIO DE INVESTIGACIÓN NACIONAL CON 21 GRUPOS

Este proyecto nacional, incluido dentro del programa de Proyectos Singulares y Estratégicos del Ministerio de Ciencia e Innovación, cuenta con un presupuesto financiable de 4,4 millones de euros para el conjunto de los 21 grupos nacionales que participan en Nanosost, pertenecientes a cuatro universidades, ocho centros tecnológicos y nueve empresas pertenecientes a Aragón, Cataluña, Madrid y País Vasco.

Jesús Santamaría detalla que, entre los objetivos perseguidos por Nanosost, está evaluar la eficacia de algunas medidas habituales de protección como las máscaras protectoras, que aunque se utilizan comúnmente en el manejo de nanopartículas no han sido diseñadas para ello.

"En la actualidad se sabe cuándo una nanopartícula es peligrosa teniendo en cuenta si es explosiva o inflamable, pero se desconocen los efectos que puede tener en el cuerpo", asegura remarcando que sólo hay algunos grupos de investigación americanos o británicos que han realizado algunos estudios sobre esta cuestión, en la que es importante investigar. "La premisa de la que se parte son los conocimientos existentes en seguridad química, pero en nanopartículas generadas por nanotubos de carbono no se conoce prácticamente nada", analiza este científico del INA.

El grupo aragonés NFP participa en este proyecto como líder de dos subproyectos. Jesús Santamaría dirigirá uno de ellos, el dedicado a la síntesis y caracterización de nanomateriales que sirvan como referencia para el resto de tareas del proyecto. El paso previo e imprescindible es entender el comportamiento de las nanopartículas de forma aislada o como integrantes del producto final o como productos en sí mismos, hasta su eliminación. "Se procederá a marcar las nanopartículas, para estudiar su comportamiento. Se establecerán cuáles pueden servir de referencia válida para el resto de tareas de este proyecto. Al hablar de nanopartículas hay que tener en cuenta que siempre han existido, pero ahora contamos con elementos nuevos, con los que hay que tener mucho cuidado", remarca Jesús Santamaría.

El otro subproyecto con el que este grupo de excelencia del INA participa en Nanosot está supervisado por Francisco Balas, y establecerá las condiciones experimentales de generación y monitorización de aerosoles nanoparticulados, estableciendo así los parámetros más adecuados para evitar el contacto de los seres vivos y el medio ambiente con nanomateriales potencialmente perjudiciales.

Además de estos dos proyectos, los investigadores del equipo del INA dirigido por Santamaría participarán activamente en otros dos subproyectos del proyecto Nanosost centrados en el estudio de las condiciones de control de nanopartículas en ambientes de investigación e industriales, así como el diseño de materiales que sirvan de barreras efectivas frente a las nanopartículas.

El Departamento de Ciencia, Tecnología y Universidad convoca anualmente subvenciones a la actividad investigadora de los grupos de investigación reconocidos por el Gobierno de Aragón, siendo la cuantía global prevista en la última convocatoria de 4.020.000 euros.

El establecimiento de estas ayudas para el fomento de la actividad investigadora de calidad desarrollada en los distintos centros u organismos de investigación, a través de los grupos de investigación, adquiere ya relevancia en el II Plan Autonómico de Investigación, Desarrollo y Transferencia de Conocimientos de Aragón, ya que en él se prevé, dentro de sus acciones generales, el fomento de la investigación mediante una línea de financiación, básica y flexible, a favor de la actividad de dichos grupos de investigación consistente en la concesión de ayudas económicas.

La experiencia adquirida a lo largo de estos últimos años ha permitido comprobar la utilidad de la estructura de grupos de investigación como un elemento fundamental para la ordenación e impulso de la actividad investigadora y, por tanto, la importancia que tienen las convocatorias destinadas a conceder ayudas y a reconocer formalmente a los grupos de investigación.

El reconocimiento de una actividad investigadora de calidad y, en consecuencia, la concesión de subvenciones para su sostén, se produce cuando los grupos de investigación reúnen determinados requisitos en cuanto a su composición y estructura y cuando además el nivel de su actividad investigadora ha quedado acreditado mediante una evaluación científica.

Los grupos de investigación reconocidos por la Administración de la Comunidad Autónoma de Aragón se clasifican en varios tipos: Grupos de Investigación de Excelencia; Grupos de Investigación Consolidados; Grupos Consolidados de Investigación Aplicada; y Grupos de Investigación Emergentes.

El grupo "Películas y Partículas Nanoporosas" (NFP), dirigido por Jesús Santamaría, está reconocido como Grupo de Investigación de Excelencia. Esta consideración, según recoge esta convocatoria publicada en el BOA, se establece cuando un grupo o conjunto de investigadores, con una actividad coherente, ocupa un lugar destacado en su área de conocimiento por la intensidad y la calidad de su labor investigadora, caracterizada por publicaciones en medios de impacto, patentes, proyectos de investigación, captación de recursos, y actividades de transferencia de resultados, entre otras actuaciones.

Además, el grupo deberá tener una clara proyección en los ámbitos nacional e internacional, y sus contribuciones deberán ser tales que, por su calidad e intensidad, el grupo pueda considerarse situado en torno al 10% superior en el panorama nacional de su área de conocimiento.

El Departamento de Ciencia, Tecnología y Universidad del Gobierno de Aragón, además de reconocer y apoyar el trabajo de 262 grupos de investigación, es consciente de la importancia de divulgar esos resultados a la sociedad. Con esta finalidad, apoya la iniciativa "Aragón Investiga", un proyecto de divulgación que pretende desde su creación en 2003 hacer llegar a la sociedad aragonesa el interés de los temas de investigación que se vienen abordando en Aragón.