ZARAGOZA, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -
Caja Inmaculada (CAI) estrena hoy en la Sala CAI Luzán, situada en el zaragozano Paseo de la Independencia, el servicio de 'signoguías' para que las personas sordas que visitan la exposición de esta sala, 'El Bodegón español en el Prado', puedan recibir las explicaciones de los cuadros en la lengua de signos. Es la primera sala de exposiciones de la capital aragonesa en usar esta tecnología.
Las 'signoguías' son unos reproductores portátiles de vídeo digital, con el que el usuario selecciona, mediante pantalla táctil, el cuadro que está viendo en la sala y un interprete le explica, en lengua de signos, la exposición, con la misma información que se facilita en las visitas guiadas. Además, la reproducción se puede detener, retrasar o adelantar cuando el usuario lo desee.
Según declaró el director de la Obra Social de Caja Inmaculada, Pedro Camarero, a los medios de comunicación durante la presentación de las 'signoguías', el objetivo de este servicio es "eliminar las barreras de comunicación" que impide a las personas sordas "gozar de algunas actividades culturales".
Camarero explicó que el aparato de las 'signoguías' es "muy innovador e intuitivo", ya que cuenta con "la última tecnología", aunque aseguró que son de "muy fácil manejo", para que "todos los que lo deseen puedan acceder a este servicio".
Esta iniciativa puesta en marcha por la CAI cuenta con la colaboración de la Fundación de la Agrupación de Personas Sordas de Zaragoza y Aragón (ASZA)-Aragón Accesible', formada por personas sordas, y que se ha encargado de todo el proceso de traducir a la lengua de signos los contenidos de la exposición.
El presidente de ASZA, Jesús Carlos Laiglesia, agradeció a Caja Inmaculada la puesta en marcha de las 'signoguías', porque "es muy costoso suprimir las barreras de comunicación en el ámbito de la cultura", apuntó Laiglesia.
Además, agregó que espera que esta iniciativa "sirva como ejemplo a otras entidades y se animen a implementar este servicio", para que las personas sordas, unas 7.100 en Aragón, puedan "disfrutar de la cultura sin ningún tipo de barreras".
Por último, el director de la Obra Social de CAI comentó que por el momento, en la sala se han puesto a disposición de las personas sordas cinco 'signoguías'. Pedro Camarero añadió que "el reto es que este sólo sea el inicio para que todas las salas tengan este sistema y permitan a las personas sordas disfrutar de la cultura".
