Agentes de diversos cuerpos policiales ofrecen protección especial a 134 mujeres oscenses víctimas de la violencia

Actualizado: martes, 11 abril 2006 21:54

HUESCA, 11 Abr. (EUROPA PRESS) -

Agentes de la Policía Local de Huesca, la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía realizan labores de protección a un total de 134 mujeres de la provincia de Huesca víctimas de la violencia de género.

En la ciudad de Huesca se han impuesto 55 órdenes de alejamiento a otros tantos hombres; en Jaca, 28, y en el resto de la provincia son 51 las personas protegidas por este tipo de violencia. Unos datos que han trascendido en la Junta Provincial de Seguridad que se ha celebrado hoy en Huesca, con el objeto de abordar el protocolo de colaboración y coordinación entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad estatales y locales para la protección de las víctimas de violencia doméstica y de género.

El protocolo de actuación establece la coordinación policial para tomar las medidas oportunas en cuanto el juez dicta una orden de alejamiento. Javier Fernández, delegado de Gobierno en Aragón, apuntó entre las medidas dar aviso al Instituto Aragonés de la Mujer, en caso necesario buscar un alojamiento seguro e incluso a veces hay que realizar desplazamientos a otras localidades, impedir que el agresor se acerque a la víctima y prestar ayuda psicológica.

La reunión de hoy se ha llevado a cabo tras la celebrada la pasada semana en la Delegación del Gobierno en Zaragoza, en aquella ocasión la reunión era de ámbito local y ahora se pretende extender la información sobre el protocolo de actuación a través de las diferentes Juntas Locales de Seguridad.

Además del delegado de Gobierno en Aragón, en la reunión han estado presentes el subdelegado de Gobierno en Huesca, Ramón Zapatero; el alcalde de la ciudad, Fernando Elboj, así como alcaldes o representantes de localidades con Policía Local. También responsables de las Policías Locales de estas poblaciones, de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Policía.

La experiencia en este tipo de casos habla de "una triste realidad", que trasladó Fernández y es que "los datos confirman que la violencia doméstica y de género se da en todas las capas sociales, tanto en ciudades como en pequeños núcleos. Un problema muy antiguo que, en los últimos años, ha visto un aumento notable en el número de denuncias".