MONZÓN (HUESCA), 23 Ago. (EUROPA PRESS) -
El programa La Movida 2008, promovido por el Servicio Social de Base de la Comarca del Cinca Medio, ha finalizado esta semana con una fiesta de disfraces en Monzón y con un balance de participación de cerca de 580 niños en las actividades realizadas en diferentes puntos de la comarca durante los meses de junio, julio y agosto.
Los juegos, excursiones y talleres han protagonizado la programación. Este año, como novedad, se han incluido actividades específicas para los más mayores, como un campeonato de la 'play station', 'paintball' o excursiones a lugares como la Peñeta Blanca, en el río Sosa y al centro de interpretación de La Pinzana.
De la supervisión de los niños se han encargado 12 monitores de tiempo libre, a los que se han sumado siete más en prácticas, diez voluntarios y dos trabajadoras del Servicio Social de Base.
El Servicio Social de Base del Cinca Medio destaca en una nota de prensa el importante número de participantes que ha habido en los pueblos, entre los que destacan cifras como los 40 niños de Binaced y la treintena en Alcolea en una sola semana.
Además, ha participado una veintena de niños de Santalecina, Pomar y Albalate y entre 10 a 15 de Alfántega, Selgua y Estiche. A estos hay que sumar el total de 326 de Monzón, con asistencias media al día de unos 150 niños. El número total de participantes, unos 580 niños, superan a los 549 del año pasado.
LA MOVIDA
El Servicio Social de Base del Cinca Medio ha celebrado por decimoctavo año el programa La Movida en Monzón, que desde hace ocho años se desplaza, además, a las poblaciones de la comarca, acercando los servicios socio-comunitarios al medio rural y una oferta de tiempo libre para los chavales.
El programa se financia por medio de un convenio entre la Comarca del Cinca Medio y el Instituto Aragonés de Empleo, con un presupuesto total de más de 67.500 euros.
Así, se posibilita la oferta de un espacio y tiempo donde los niños y adolescentes puedan desarrollarse como personas, a través de la educación y formación en habilidades sociales, relacionales, culturales, deportivas y manuales.
Además, se crea un ambiente lúdico-educativo donde aprenden a compartir, responsabilizarse y trabajar en grupo; se ofrece un servicio de apoyo a las familias donde los padres trabajan y no pueden atender todo el tiempo de ocio de sus niños; y se posibilita la introducción en el mundo laboral a los jóvenes formados en animación y trabajo sociocultural.
