Expo 2008.- Zapatero aboga por avanzar hacia una nueva cultura del agua y solucionar fallos de un "progreso errático"

Actualizado: sábado, 14 junio 2008 1:26

ZARAGOZA, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -

El presidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero, abogó hoy en Zaragoza por avanzar hacia una nueva cultura del agua, modificando "nuestros parámetros culturales" e "intentando solucionar los fallos cometidos por un progreso erráticamente planteado".

Rodríguez Zapatero se pronunció así durante su intervención en el acto de inauguración de la Exposición Internacional Zaragoza 2008, en el Palacio de Congresos de la Muestra, acto presidido por Sus Majestades los Reyes de España, don Juan Carlos y Doña Sofía, y al que asistió el resto de miembro de la Familia Real.

El presidente del Gobierno señaló que "las generaciones actuales más que ninguna otra" tienen que acometer "los problemas de degradación del planeta". Además, "necesitamos grandes acuerdos entorno al agua, que nos permitan abordar los problemas de hoy y establecer las bases de un futuro posible, solidario y pacífico".

"No podemos herir a lo que cura, manchar a lo que limpia, agotar lo que renueva", dijo Rodríguez Zapatero, que estimó que la Expo de Zaragoza va a permitir "un encuentro entre culturas", a partir del "diálogo y el respeto a la diversidad, necesarios para solucionar los problemas el agua".

El presidente de España aseguró que "superar las crisis del agua y del saneamiento son el gran desafío del siglo XXI", ante los "efectos negativos de su carencia", con "millones de niños que mueren cada año por no disponer de agua en buenas condiciones", además de que "más de mil millones seres humanos carecen de agua limpia y 2.600 millones no cuentan con sistemas de saneamientos adecuados".

Agregó que "todos y cada uno de los ochos objetivos del milenio están fuertemente condicionados por el agua, sus usos, existencia y disponibilidad"; hay conflictos internacionales "que tiene una dimensión hídrica insoslayable" y es preciso aceptar el cambio climático en los mapas del agua. "Permanecer pasivos e indiferentes sería una equivocación de graves consecuencias", subrayó.

REGALO DEL AGUA.

Rodríguez Zapatero mencionó el hecho de que se hubiera tenido que cambiar el acto inaugural a consecuencia de la crecida del Ebro. "Nos alegramos y celebramos este regalo del agua, un tanto abrumador, que la naturaleza nos ha hecho a toda España coincidiendo con la Expo; no saben hasta que punto agradecernos", apostilló.

El presidente de España aseguró que el Ebro "es un gran patrimonio de nuestro país y de todos los españoles y por eso no es casual que sea la sede de esta Expo y la impregne", otorgándole vida, fuerza, paciencia, perseverancia y "la certeza que un caudal que crece con el diálogo, el respeto mutuo y la conjunción de esfuerzos".

La Expo es, continuó Rodríguez Zapatero, es "el resultado de la responsabilidad y del trabajo guiados por la noble ilusión de hacer de Zaragoza referencia internacional" y muestra del compromiso de España "con los retos de los próximos años".

El presidente de España trasladó su felicitación al presidente de la Sociedad Expoagua, Roque Gistau, al comisario de Expo, Emilio Fernández-Castaño, y a las administraciones públicas y autoridades de Zaragoza y Aragón "por promocionar este evento" y por un trabajo "bien hecho" y coordinado, que hizo extensivo a todos los trabajadores y personas que implicadas en él, con unas obras públicas "señeras y emblemáticas par a la Expo y para la ciudad".

Además, dio la bienvenida a todas las delegaciones de los 105 países participantes, a quienes "recibimos en una España plenamente abierta al mundo, comprometida con los desafíos de la gobernabilidad internacional, la paz, los derechos humanos, la lucha contra la pobreza y el crecimiento económico y desarrollo sostenible".

Una España con "vocación europeísta" y también "con vocación latinoamericana". Además, "nos complace mucho contar con la presencia de países africanos y asiáticos, dos contenientes a los que España dirige creciente atención e interés en su acción exterior", recalcó el presidente español.

PAÍS MÁS AVANZADO.

Rodríguez Zapatero agregó que si la Expo Universal de Sevilla "representó la nueva carta de presentación de nuestro país en el mundo", esta Expo quiere contribuir "a hacer del plantea un lugar más habitable, más justo, más digno para todos" y mostrar un país, tras estos 16 años, "más avanzado y activamente participante en el concierto internacional".

"Con la Expo hemos querido poner los ojos del mundo sobre este bien generoso, pero limitado, que es el agua, para que lo que es fuente de progreso sea de bienestar para todos" y deseó, finalmente, "que los hombres y mujeres de Zaragoza y de España, los participantes, visitantes y también las personas encargadas de la seguridad, colmemos las ilusiones que aquí hemos puesto".

Rodríguez Zapatero pronunció estas palabras en un acto presidido por Sus Majestades los Reyes de España, y al que también asistieron el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Duräo Barroso; el jefe de Gobierno del Principado de Andorra, Albert Pintat; el Primer Ministro de Marruecos, Abbas el Fasi; el presidente de México, Felipe Calderón; y el presidente de la República Portuguesa, Aníbal Cavaco Silva.

Además, estaban presentes el presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, el presidente de la Oficina Internacional de Exposiciones, Jean-Pierre Lafon, y el comisario de Expo, Emilio Fernández-Castaño, así como nueve presidentes autonómicos, el presidente del PP, Mariano Rajoy, y el Nuncio de la Santa Sede, Manuel Monteiro de Castro. Más de 5.000 personas han asistido a la ceremonia inaugural.

La Exposición Internacional Zaragoza 2008 se abrirá mañana al público y se celebrará hasta el próximo 14 de septiembre con el lema 'Agua y desarrollo sostenible'. La Muestra espera recibir más de seis millones de visitantes y en ella participan 105 países en un recinto de 25 hectáreas, ubicado en el Meandro de Ranillas de la capital aragonesa.

La Exposición Internacional Zaragoza ofrecerá a los visitantes tres pabellones temáticos, seis plazas temáticas y pabellones colectivos que acogen a los países participantes, instituciones, comunidades autónomas, empresas, organizaciones internacionales --entre ellas las Naciones Unidas y la Unión Europea--, organizaciones no gubernamentales (ONG) y asociaciones, así como los pabellones de España y Aragón.