La Fundación Ramón y Katia Acín da a conocer, en una un página web, la obra artística de estos dos oscenses

Actualizado: martes, 3 junio 2008 17:48

HUESCA, 3 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Ramón y Katia Acín pondrá en marcha, el próximo sábado día 7 de junio, a las 12,00 horas en la sede del Instituto de Estudios Altoaragoneses (IEA), la primera página web que recoge la obra artística de padre e hija.

Se trata de la primera iniciativa llevada a cabo por la Fundación creada en el año 2007 con el fin de preservar y difundir la obra de estos dos artistas oscenses. Este proyecto en red contiene textos en torno a la vida y la obra de los Acín, y al mismo tiempo pone a disposición del internauta alrededor de 6.000 documentos entre obra artística, audiovisuales, fotografías y escritos realizados por el propio Ramón Acín. El gran volumen de información que se ofrece en esta página web la convierte en uno de los trabajos más completos que existen sobre artistas en la red.

Ramón Acín (1888-1936) se ha convertido en uno de los artistas aragoneses más importantes del siglo XX. A lo largo de su vida fue creador, pedagogo, escritor y movilizador social desde el anarquismo pacífico. Su compromiso político lo llevó a participar en la sublevación de Jaca contra la dictadura de Primo de Rivera en 1930 y, tras el fracaso de ésta, tuvo que exiliarse en Francia. Seis años más tarde murió fusilado en la capital oscense a manos de los sublevados franquistas.

Dejó tras de sí una obra rica y extensa que abarca la pintura, el dibujo, el humor gráfico o la escultura. Suya es la conocida Fuente de Las Pajaritas instalada en el Parque de Huesca o el monumento al geólogo Lucas Mallada, situado también en la ciudad. Amigo de personalidades como Ramón Gómez de la Serna, también será siempre recordado como el mecenas que financió la película 'Las Hurdes, tierra sin pan', de Luis Buñuel.

Katia Acín (1923-2004) es hija de Ramón Acín y de Conchita Monrás. El asesinato de sus padres en el año 1936 cuando tenía 12 años cerró la feliz etapa de la infancia, pero siguió aferrándose a la vida con una entereza y vitalidad sorprendentes. Se licenció en Historia, se casó y tuvo cinco hijos.

Tras la muerte de su marido decidió recuperar la inquietud por la pintura que le había inculcado su padre y a los 65 años emprende la carrera de Bellas Artes. Su obra, extensa y sin catalogar en su totalidad, abarca xilografías y linóleos, calcografía, dibujos, pintura y escultura.