El Ministerio de Medio Ambiente aprueba la variante de Alcorisa (Teruel), en la carretera N-240

Actualizado: viernes, 2 marzo 2007 19:22

TERUEL, 2 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Ministerio de Medio Ambiente ha formulado la Declaración de Impacto Ambiental del proyecto de la variante de Alcorisa, en la carretera N-420 (N-211), obra promovida por la dirección general de Carreteras del Ministerio de Fomento.

La declaración ha resuelto que la alternativa norte afecta menos desde el punto de vista ambiental que la alternativa sur, propuesta por el promotor. Por tanto, se confirma que la opción seleccionada es compatible con el medio ambiente por no observarse en su realización impactos adversos significativos siempre y cuando se cumplan las condiciones establecidas en la misma.

La alternativa elegida presenta condiciones más favorables para el medio ambiente, ya que originará desmontes y terraplenes de menor envergadura que permitirá adaptarse mejor al terreno con bastante menos afección al paisaje y, además, afectará en menor grado a la flora y la fauna, como también indica el informe emitido por el servicio regional de Protección del Medio Ambiente de la Diputación General de Aragón. Asimismo dicha alternativa está más alejada de la población de Alcorisa que la sur, dejando una amplia extensión de terreno para su expansión.

El objeto del proyecto es seleccionar el trazado más recomendable para la construcción de la variante de la actual carretera N-420, que evite la travesía por el municipio de Alcorisa (Teruel). Se justifica por el aumento del nivel de servicio de la N-420. En la actualidad constituye una travesía peligrosa dada su estrechez y sinuosidad y el riesgo de accidentes es alto.

Con el fin de garantizar la máxima protección posible, la Declaración de Impacto Ambiental establece una serie de condiciones ambientales, entre ellas, las encaminadas a proteger la hidrología. Para este fin se diseñarán obras de drenaje transversal que ayudarán a reducir el riesgo de impactos sobre las aguas superficiales.

La escorrentía superficial será recogida y evacuada por cunetas longitudinales que, al mismo tiempo recogerán y evacuarán los márgenes de la carretera. Durante la fase de construcción, las aguas de escorrentía de lluvia sobre tierras removidas se recogerán en balsas de decantación antes de incorporarlas a los cursos naturales.

Las dos alternativas consideradas en el estudio de impacto ambiental contemplan una estructura importante para salvar el río y lo amplio de la solución planteada no deja dudas sobre la mínima afección al régimen del río, informan desde el Ministerio de Medio Ambiente.

Con el fin de proteger los bienes culturales, antes de comenzar las obras, y de acuerdo con la Dirección General del Patrimonio Cultural, se comprobarán las zonas arqueológicas que posiblemente sean afectadas por las trazas, con objeto de confirmar su existencia.

Si fruto de las prospecciones aparecieran yacimientos arqueológicos se determinará su interés y afección, adoptando medidas concretas para su documentación y protección. Todas las actuaciones en materia de arqueología deberán ser coordinadas y supervisadas por los servicios técnicos del Departamento de Educación y Cultura, agregan.

En función de la documentación generada a lo largo de este proceso de evaluación se estima necesario, presentar, antes del comienzo de las obras, una zona de préstamos vertederos y zonas auxiliares, indicándose los criterios ambientales de exclusión y cartografía a escala apropiada.

Además, el trazado definitivo se ajustará en coordinación con la dirección general de Patrimonio Cultural de forma que se minimice la afección a los yacimientos arqueológicos de la zona. Asimismo, se repoblará una superficie doble a la ocupada por la carretera en el emplazamiento que considere necesario o conveniente el Departamento de Medio Ambiente de la Diputación General de Aragón.

Con el fin de garantizar el cumplimiento de las medidas propuestas y realizar un control los efectos no anticipados por medio de una modificación de las medidas correctoras, el estudio incluye un Plan de Vigilancia Ambiental que contempla las fases de construcción y explotación.