TERUEL, 10 Jun. (EUROPA PRESS) -
Numerosos pueblos de la provincia de Teruel son idóneos para acoger observaciones científicas del firmamento, dada su altitud y las bajas temperaturas que registran incluso en verano.
El portavoz de la agrupación astronómica turolense Actuel, Fernando García, comentó que las altas temperaturas, que comienzan a registrarse ahora, al final de la primavera, dificultan la observación de estrellas y planetas, si bien "como en Teruel tenemos pueblos fresquitos, el enfriamiento es rápido" y de noche se pueden realizar buenas observaciones.
"En las zonas asfaltadas y con poca altitud es mucho peor", continuó García, quien recordó que "en Teruel no abundan mucho estas cosas". Respecto al material a utilizar, dependiendo del objeto a observar, Fernando García recomendó utilizar prismáticos o telescopios de objetivos de hasta 150 milímetros, con un coste de entre 300 y 1.000 euros.
