TERUEL, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno central y candidato socialista a la reelección en las elecciones generales del próximo 9 de marzo, José Luis Rodríguez Zapatero, prometió esta tarde en Teruel centrar sus esfuerzos en la lucha por la igualdad de género y la "revolución económica" que suponen las energías limpias. Zapatero llenó el Palacio de Exposiciones y Congresos en un mitin de pre-campaña en el que también participó el presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias.
Zapatero aseguró que "el gran retraso" que ha padecido España, además de la dictadura franquista, fue "la dominación, la marginación, la discriminación de la mujer, el machismo" y apostó por equiparar el desarrollo económico de España con el de Francia facilitando el acceso al empleo de todas las mujeres pertenecientes a la población activa.
"Nos falta que trabajen tantas mujeres en España como en la media europea", continuó el presidente, quien reconoció que en esta materia "tenemos un retraso" estructural.
"Propongo que --los años de la próxima legislatura-- los declaremos los cuatro años de las mujeres y del trabajo de las mujeres", dijo Zapatero, quien consideró que "quien más va a ganar son los hombres, los más jóvenes", porque "cuando lleguen a la edad laboral podrán decir: somos de la España que está en la vanguardia de los derechos, la modernidad y el bienestar social". También dijo que "este país no va a dar un paso atrás en extender la igualdad plena de derechos entre las mujeres y los hombres" y celebró la puesta en marcha de la Ley de Igualdad de Género.
A esto añadió que, siglos atrás, tras llegar España tarde a la primera revolución industrial, ahora "estamos a las puertas de una nueva revolución económica" que soslayará el uso del carbón y el petróleo en beneficio de las energías renovables, "que están ahí, que tienen mucho más potencial y son mucho más respetuosas con la naturaleza", de tal manera que "vamos a estar entre los primeros en la lucha contra el cambio climático y por un sistema económico que se base en otras energías". Zapatero aprovechó para felicitar a Iglesias, uno de cuyos ejes de Gobierno son, precisamente, las energías limpias.
INMIGRANTES.
Zapatero aludió a las declaraciones realizadas hoy por el dirigente nacional del PP y ex ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, quien dijo que las urgencias hospitalarias de la red pública sanitaria están colapsadas porque los inmigrantes han descubierto la grandeza del sistema de salud. En nombre de los ciudadanos españoles, Zapatero pidió disculpas a los "trabajadores inmigrantes". De España, el presidente dijo que "es un país que trata dignamente a la gente que viene a trabajar porque así queremos que nos reconozcan en el mundo" y criticó las "ideas rancias" expresadas por Cañete.
Según Zapatero, quien piensa así de los inmigrantes, lo extiende a todos los trabajadores y volvió a criticar a Arias Cañete porque "le parece bien que hagan --los inmigrantes-- los trabajos duros, que coticen a la Seguridad Social" y critica que utilicen la sanidad pública, planteamiento que es "injusto, inaceptable, intolerable" y constituye una "ofensa discriminatoria", frente a lo cual celebró que España es "un país que defiende la legalidad pero es digno".
El presidente del Ejecutivo central consideró "grave" estas declaraciones de Arias Cañete y criticó, por otra parte, las "ocurrencias" del presidente nacional del PP, Mariano Rajoy, quien ha propuesto que los inmigrantes firmen un contrato con el Estado para comprometerse a tener una buena conducta social y laboral, propuesta que Zapatero rechazó. El también secretario general de los socialistas limitó la responsabilidad de los inmigrantes al cumplimiento de sus derechos y obligaciones establecidos legalmente en cada momento.
Sobre la conveniencia de que los inmigrantes respeten las costumbres españolas, Zapatero recordó que "afortunadamente, no todos los españoles tenemos las mismas costumbres, hay muchas diferencias" y se preguntó "cuáles serán" las costumbres a las que alude Rajoy, tras lo que tildó también de ocurrencia la propuesta de Rajoy de plantar 500 millones de árboles en cuatro años para luchar contra el cambio climático.
En realidad, estas propuestas se deben a que los populares "no han hecho los deberes" durante la legislatura recién concluida, en el sentido de que "en cuatro años no les habréis oído hacer una propuesta al país", ya que "sólo han hecho que obstruir, poner dificultades y usar el terrorismo para hacer oposición, lo último que deberían haber hecho".
Tras tildar de "desfachatez" las críticas de Rajoy a los resultados de la economía española en la actualidad, Zapatero dijo presentarse a las próximas elecciones con la credencial de "haber arrimado el hombro en las tareas del Estado, de haber sido leal a los intereses generales, de haber apoyado a Aznar (1996-2004) en la lucha antiterrorista" --lo que "hice porque para mí la lucha por la libertad, la defensa de nuestro país, está por encima de cualquier ambición política", dijo--, mientras que hoy "Rajoy no puede ir a ningún sitio a decir que ha sido leal y eso siempre estará ahí".
Zapatero agradeció a los militantes y simpatizantes socialistas "la serenidad, contención y prudencia" demostrada durante la legislatura en esta materia.
CREENCIAS.
Después de criticar a Rajoy por manifestarse "con los obispos", José Luis Rodríguez Zapatero afirmó que "este país decidió hace tiempo, cuando le dieron la oportunidad, que nadie tiene derecho a imponer una moral y una religión" y "todo el mundo tiene derecho a pensar libremente". El presidente garantizó "que vamos a seguir avanzando en la extensión de los derechos y libertades individuales", lo que identificó con "la visión moderna de un país". Como ejemplo de modernidad mencionó las últimas investigaciones en técnica biomédica por su potencial para "dar esperanza" a personas con determinadas enfermedades.
España "no tolera que una minoría radicalizada intente utilizar, como ha pasado en la Comunidad de Madrid, a profesionales, a médicos, que en su trabajo intentaron salvar vidas o hacer que la vida llegue hasta el último momento con dignidad" y "han sido perseguidos cuando eran inocentes". También se refirió a su modelo de defensa de la Paz internacional y el "entendimiento entre los pueblos".
Zapatero se vanaglorió de haber cumplido promesas como subir a 600 euros el salario mínimo interprofesional, aumentar las pensiones mínimas y destacó que el paro se sitúa ahora en el ocho por ciento de la población activa, frente al 11,3 por ciento que hubo en el último año de Gobierno del PP. Sobre las arcas públicas, destacó que hay un "ahorro" de 70.000 millones de euros y que el fondo de reserva de la Seguridad Social dispone de otros 50.000 millones.
ARAGÓN.
De Aragón, el presidente Zapatero dijo que "está fuerte, crece" y que Teruel "está en marcha" porque se está recuperando el índice de población y aumentando el número de puestos de trabajo, mientras "las infraestructuras van llegando".
Zapatero mencionó la puesta apertura de todo el recorrido de la autovía mudéjar (Somport-Sagunto) y prometió "estudiar" la construcción de un nuevo corredor de mercancías entre Valencia y Madrid por Teruel.
"Reitero mi compromiso con esta tierra", prosiguió Zapatero, quien prometió levantar en Teruel el Museo Etnográfico de España y firmar el convenio correspondiente en los dos meses siguientes a las elecciones generales, si vuelve a ganar.
