Zaragoza.- El alcalde de Pradilla asegura que la localidad está "tranquila" ante la avenida ordinaria del río Ebro

Actualizado: lunes, 2 junio 2008 20:22

ZARAGOZA, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Pradilla de Ebro, Luis Eduardo Moncín, aseguró hoy a Europa Press que en este municipio zaragozano están "tranquilos" ante la nueva avenida ordinaria del Ebro, ya que no se prevé que el aumento de caudal del río vaya a suponer ningún riesgo para el casco urbano de Pradilla.

Esta localidad es una de las que se ve siempre más afectada ante cualquier aumento del caudal del río Ebro. Sin embargo, en esta ocasión, los vecinos viven la crecida ordinaria del río con tranquilidad aunque el río alcanza ya los seis metros de altura, según explicó el primer edil.

En esta localidad la situación "está bien. Mañana llegará la punta de la crecida pero la situación no es alarmante". Por lo tanto, "estamos tranquilos", porque habrá "los problemas habituales" que se producen cuando hay crecidas, "se anegarán algunos campos, pero en el casco urbano no habrá ningún problema".

CRECIDA EN ZARAGOZA.

La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) prevé que la crecida ordinaria que experimenta el río Ebro llegue a partir de la tarde de mañana martes, 3 de junio, a Zaragoza con un caudal que se situará entre los 1.600 y los 1.900 metros cúbicos por segundo.

Este nivel se mantendrá hasta el jueves y la punta en la capital aragonesa podría alcanzarse durante la madrugada del martes al miércoles. Además, las previsión de caudal se sitúa por debajo de lo registrado en abril de 2007.

DESEMBALSES.

Por otra parte, el Organismo de Cuenca cesó ayer los desembalses en la Cuenca del Aragón (en los embalses de Itoiz y Yesa) para reducir las aportaciones de este afluente al Eje del Ebro. También han concluido, mientras la meteorología lo permita, los vertidos controlados que se realizaron ayer en los embalses riojanos de Mansilla y Pajares. Por su parte, se han reducido al mínimo los vertidos en los afluentes de la margen izquierda del Ebro.

En el Cinca (embalse de El Grado) y el Segre (embalses de Oliana y Rialb), sólo se mantienen salidas medioambientales y concesionales y en el Noguera Pallaresa (embalses hidroeléctricos, principalmente el de Camarasa), se han disminuido al mínimo los vertidos.

Esta medida permite reducir las aportaciones de estos afluentes de la margen izquierda al Eje del Ebro en el sistema Mequinenza-Ribarroja, unos embalses que mantienen su vertido en 1.600 metros cúbicos por segundo en previsión de la llegada de caudales punta del Alto Ebro para el próximo fin de semana. El vertido se mantendrá en esta cifra mientras las previsiones meteorológicas lo permitan.