Zaragoza.- El "Psiquiatra" pasa consulta esta noche en la Sala Alaún de la localidad de Alagón

Actualizado: sábado, 2 septiembre 2006 17:44

ALAGÓN (ZARAGOZA), 2 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Sala Alaún de Alagón (Zaragoza) se convertirá esta noche en un consultorio muy especial. El Sueño Teatro llevará hasta este municipio la obra "Psiquiatra", un divertido espectáculo de un sólo actor que se desarrolla a lo largo de unas jornadas de psiquiatría con libre acceso de público. La actuación comenzará a las 22,00 horas y la entrada será libre hasta completar el aforo.

En escena aparece el doctor Peláez, director y organizador de estas primeras jornadas de acercamiento de la psiquiatría a la calle. Se sirve de uno de sus pacientes, don Carlos Gardey, para presentar al público algunos de los casos más comunes y significativos que se presentan en las consultas de psiquiatras y psicólogos en la actualidad. Este curioso paciente, don Carlos Gardey, sufre un trastorno poco corriente: disociación de la personalidad, conocida comúnmente como múltiple personalidad.

En su compleja personalidad don Carlos muestra, en primer lugar y como maestro de ceremonias, a don Carlos Gardey, un psiquiatra argentino simpático y gracioso, que es el encargado de contar tanto anécdotas propias, como de presentar y representar a algunos de sus otros "Yo".

Un artista de la escena algo paranoico y egocéntrico que sufre continuos ataques de inseguridad, que le llevan de forma continuada a la consulta del psiquiatra. Un director comercial de una importante empresa, que bajo una apariencia cordial y simpática esconde un hombre que en su casa da rienda suelta a sus ideales conservadores, misóginos y machistas, y que lo convierten en un maltratador implacable.

Un moderno cuarentón sufriendo una profunda crisis de valores, ideas, sueños y esperanzas. Una crisis de los cuarenta que desmenuzará a base de preguntas y ritmo de rap.

Todas estas variadas personalidades se desenvuelven por el escenario y a lo largo de la representación de la mano de don Carlos en su papel de psiquiatra argentino, papel que dejará de representar cuando para él suene el timbre que da por concluido el tiempo de consulta, y que da paso al auténtico promotor de este acontecimiento: el doctor Peláez.