OVIEDO, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
El magistrado del Juzgado de lo Penal número uno de Oviedo absolverá a tres hombres acusados de amenazar de muerte y de golpear a su madre debido a que las tres mujeres se acogieron al derecho de no declarar contra sus hijos, según informaron fuentes jurídicas a Europa Press.
Los tres juicios quedaron vistos para sentencia y en los tres casos la fiscal, Adoración Peñín, mantuvo las peticiones iniciales de pena aunque al acogerse las madres al derecho de no declarar contra sus hijos la fiscalía carece de carga de prueba por lo que el juez "no tiene más remedio que absolver al acusado", según indicaron las mismas fuentes jurídicas.
Estos juicios vienen precedidos de la muerte de una anciana en su vivienda de la localidad de Carbajal del municipio de Llanera a manos de su hijo que posteriormente se ahorcó tras cometer el crimen, el pasado miércoles día 26 de noviembre, y del juicio que se celebró el lunes, 24 de noviembre, en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial que condenó a un hombre a siete años de internamiento en un Centro psiquiátrico penitenciario por asestar al menos 18 puñaladas a su madre.
En el primer juicio el fiscal mantiene la pena de un año de prisión para un hombre por quebrantar una orden de alejamiento tras amenazar de muerte a su madre y a su hermana por defender a ésta.
Según el fiscal, el acusado D. A. P, mierense, de 26 años de edad, el 12 de agosto de 2006 pasó por delante del local que regenta su madre, a la que tenía prohibido acercarse a menos de 50 metros, y "tras mirarla con actitud amenazante", se pasó el dedo índice por la garganta en un gesto "que sugería que quería cortarle el cuello", al tiempo que la insultaba llamándola "Hija de puta", riendo y aplaudiendo.
Este acusado, el 9 de agosto de 2006, llamó al local que regenta su madre, y tras ponerse al teléfono una de sus hermanas le dijo que "como defendiera a su madre o se pusiera por en medio se atuviera a las consecuencias, que también iría a por ella".
EPISODIOS DE AGRESIVIDAD
Por otro lado, el fiscal mantiene la pena de seis meses de prisión para otro hombre, E. M. P. M. acusado de golpear a su madre causándole varias lesiones y la pérdida parcial de los incisivos superiores.
Según el escrito del ministerio público, el 10 de diciembre de 2007 el acusado estaba con su madre en el domicilio común, comenzando el acusado a hacer algunos gestos que le parecieron extraños a su madre que le preguntó si le pasaba algo respondiendo el procesado con una serie de puñetazos que la alcanzaron en el rostro y en el cuerpo.
El acusado dejó de golpearla y pidió perdón para a continuación reanudar la agresión, así hasta en tres ocasiones hasta que el acusado consiguió huir. A consecuencia de los golpes recibidos la víctima sufrió varios hematomas y erosiones en la cara y en el cráneo.
El acusado está diagnosticado de retraso mental ligero con episodios de agresividad, teniendo modificadas sus facultades intelectivas y volitivas en relación con los hechos antes descritos.
UN CUCHILLO DE COCINA
En el último caso, el fiscal solicita una pena de onces meses de prisión por un delito de amenazas y la pena de localización durante ocho días por una falta de injurias para un hombre que lanzó en Cangas de Onís a su madre un cuchillo de cocina "para atemorizarla".
Los hechos sucedieron el 24 de diciembre de 2007 cuando el acusado se hallaba en el domicilio que comparte con su madre y su hermano en Cangas de Onís. El procesado en un arrebato lanzó un cuchillo de cocina con intención de atemorizar a su madre.
La noche del 25 de diciembre del mismo año la insultó llamándola "hija de puta, gocha y asquerosa". Como consecuencia de estos hechos se acordó por el Juzgado de Instrucción de Cangas de Onís una orden de protección que impide al acusado aproximarse a su madre a menos de 200 metros.
Este hombre declaró en el Juzgado que "no ha amenazado a su madre y que nunca le ha lanzado un cuchillo". Además señaló que "en ocasiones va al monte a probar armas que tiene allí enterradas".
