La guardia civil que denunció acoso sexual de un superior atribuyó su baja un año antes al "estrés laboral" y a un curso

Actualizado: domingo, 13 septiembre 2009 13:46

Un informe médico del Hospital Básico de la Defensa refleja que "el origen de la patología está enraizado en su personalidad", si que exista relación con el servicio

OVIEDO, 13 Sep. (EUROPA PRESS) -

La agente de la Guardia Civil, M. G. G., que recusó a su superior jerárquico, el comandante P. A. M. A., el 17 de abril de 2009, atribuyó el 24 de junio de 2008, en un informe médico privado, al "estrés laboral" y un curso que estaba realizando como "factor desencadenarte" de su situación de baja laboral, según los informes psiquiátricos a los que tuvo acceso Europa Press.

En el informe, de parte, realizado por una clínica privada de Oviedo el psiquiatra apunta que la mujer padece un trastorno de alimentación en la adolescencia y dependencia del alcohol a los 22 años. Posteriormente, según el mismo informe, en mayo de 2003 presenta un nuevo episodio depresivo con importante afectación en la vida laboral, social y familiar ya que se acompaña con consumo de alcohol.

La denunciante, de 37 años de edad, presentó en abril de 2009 un escrito de recusación del instructor del expediente, P. A. M. A., alegando que la situación de condiciones psicofísicas en que se encontraba eran provocadas directamente por la situación laboral y sexual a la que fue sometida desde el año 2000, por parte de su superior e instructor de su expediente de baja laboral.

En la exposición de motivos la agente de la Benemérita sostiene que la conducta realizadas por el instructor del expediente contra ella "fueron presenciadas, en ocasiones, por otras personas de la comandancia, pero casi siempre, sin testigos presenciales, citándola en el despacho donde le exigía que le mostrase su ropa interior, o imponiéndole servicios nocturnos para invitarla a cenar y posteriormente realizar todo tipo de proposiciones de naturaleza sexual", reza en el escrito de recusación.

En este sentido, M. G. G. mantiene en su exposición de motivos que "existe una relación directa con el servicio" y que "su limitación para el ejercicio de sus funciones es absoluta". En otros informes, la agente señala que tuvo una bronca importante con su superior y que en alguna ocasión hacía mención a sus atributos.

INFORME MÉDICO

Por otra parte, el informe elaborado por el Hospital Básico de la defensa en Ferrol, del 21 de enero de 2009, sobre la aptitud psicofísica de la agente de la Benemérita, concluye en que la mujer padece un trastorno de la personalidad y alcohofilia, con repercusión en la conducta socio-personal. El informe sostiene que el trastorno es anterior a su incorporación en el Instituto Armado, en 1991.

El diagnóstico señala que la agente de la Guardia Civil "no puede desempeñar ninguna actividad en las Fuerzas Armadas aunque si puede desempeñar actividades laborales en el ámbito civil". Por último, este informe refleja que "el origen de la patología está enraizado en su personalidad, si que exista circunstancia o hecho concreto que lo relacione con el servicio".

A su vez, el comandante de la Guardia Civil presentó el 7 de mayo de 2009 una querella contra la denunciante por injurias y calumnias en el Juzgado de Instrucción número 1 de Oviedo, también remitido a la fiscalía que archivó el asunto al estar incoado en el Juzgado, al que remitió toda la documentación.