Un año de internamiento para un menor que rompió la mandíbula a un joven al que pegó con una cadena

Actualizado: domingo, 11 octubre 2009 13:05

SANTANDER, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia Provincial de Cantabria ha confirmado una condena de un año de internamiento en régimen semiabierto para un menor que rompió la mandíbula a un joven al que golpeó con una cadena y al que, una vez en el suelo, dio también patadas junto a otros tres jóvenes.

Según se explica en una sentencia de la Sección Tercera de la Audiencia, los hechos ocurrieron la madrugada del 20 de octubre del año 2007 en la verbena de las fiestas de San Lucas, en Hoznayo, poco antes de las dos de la madrugada.

El agredido, que tenía entonces 19 años, se disponía a marcharse junto a otro amigo y entonces se dirigió hacia ellos el acusado en compañía de otros tres jóvenes. En ese momento, el menor le golpeó en la cabeza con una cadena pitón, provocando que el joven cayera al suelo, donde el acusado y sus acompañantes continuaron la agresión dándole patadas.

Debido a la agresión, el joven sufrió diversas heridas en la cabeza, entre ellas una fractura de mandíbula de la que tuvo que ser operado. Necesitó 32 días para su recuperación, dos de los cuales permaneció ingresado en el hospital. Como secuelas le han quedado varias cicatrices y molestias al masticar que "seguramente desaparecerán con el tiempo".

El Juzgado de Menores de Santander dictó sentencia en mayo de este año condenando por un delito de lesiones al menor agresor, que cumplía 17 años sólo unas horas después de la agresión.

En su fallo, el Juzgado decidió imponerle una pena de un año de internamiento en régimen semiabierto y la obligación de indemnizar al otro joven con algo más de 5.100 euros por los días empleados en su curación y por las secuelas; y con otros 1.703 euros al Servicio Cántabro de Salud por los gastos sanitarios.

El menor recurrió esta sentencia ante la Audiencia cuestionando la conclusión de la sentencia de instancia sobre los hechos y tachando además de "desproporcionada y perjudicial" la medida de internamiento, pero la Audiencia ratifica la sentencia del Juzgado de Menores.

Según dice, la sentencia se apoya en la declaración del joven agredido, que se mantuvo en todo momento "sin ambigüedad ni contradicciones" y, además, "queda confirmada" por los informes de urgencias de Valdecilla y del médico forense, y por la declaración del amigo que le acompañaba.

Por contra, cuestiona los testimonios de dos personas que situaban al condenado en otro lugar la noche de los hechos, pero que dieron diferentes fechas en la fase de instrucción y finalmente en el juicio. De hecho, la Audiencia recalca que la propia Fiscalía y la jueza de menores decidieron deducir falso testimonio.

Por último, en cuanto a la condena, la Audiencia comparte la medida de internamiento que, a su entender, está justificada por la "negativa evolución y comportamientos conflictivos" del menor, que mantiene una conducta "transgresiva", se relaciona con menores "de conducta desajustada" y muestra además un "consumo abusivo de alcohol y egocentrismo en sus actitudes internas".