Cree que no se puede hablar con ETA mientras no salgan sus miembros "uno a uno y en fila entregando las pistolas"
SANTANDER, 31 Dic. (EUROPA PRESS) -
El jefe del Ejecutivo cántabro, el regionalista Miguel Ángel Revilla, calificó hoy de "correcta" la intervención de ayer del presidente del Gobierno de España anunciando la suspensión del diálogo con ETA, pero Revilla echó en falta en las palabras de José Luis Rodríguez Zapatero "un poco más de fuerza, de contundencia y de mala leche".
Además, consideró que el atentado de ayer en la T-4 de Barajas "es un pequeño patinazo" para quienes apostaban por el denominado 'proceso de paz'. "Yo siempre he dado un margen de confianza a la negociación, pero también he dicho siempre que me mostraba extraordinariamente pesimista. No sé qué información podía tener el Gobierno para vislumbrar que éstos iban a dejar de poner bombas", se preguntó Revilla.
A su juicio, ahora "es el momento de actuar con la ley" y confió en que el Gobierno "habrá tomado buena nota de que con esta gente, salvo que vengan uno a uno y en fila entregando las pistolas, no se puede hablar".
El líder regionalista reiteró que en ETA hay "una mayoría de psicópatas perversos que están habituados a matar, a vivir del cuento y no pegar un palo al agua". "Es muy cómodo y muy cobarde matar, y cobrar por matar como están haciendo estos sinvergüenzas", lamentó.
Del mismo modo, y como ya hiciera ayer, insistió en que "es el momento" de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, de los jueces, de la unanimidad del pueblo español en torno a la paz y de terminar con la "total impunidad" de la que disfruta "la ETA de corbata, sobre todo Otegui y compañía". "Esos señores son tan etarras y tan asesinos como los que ponen las bombas. Más cobardes todavía porque encima van de líderes", apostilló.
El presidente cántabro, socio de Gobierno del PSOE, respondió hoy de esta manera a preguntas de los periodistas, momentos antes de participar en Santander en la concentración silenciosa celebrada en la plaza del Ayuntamiento de la ciudad.
Revilla recordó que "esta escena" de la población santanderina concentrada frente al Ayuntamiento hacía "tres años" que no se vivía y confesó su temor de que, "a partir de ahora", se repita más veces la escena. Por ello, abogó por "armarse de paciencia", con la convicción de que la "batalla" al terrorismo, aunque "va a costar sufrimiento", finalmente se ganará.
