Subraya el compromiso con el TAV y Valdecilla, confía en recabar votos regionalistas y espera defender la región igual que un cántabro
SANTANDER, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Administraciones Públicas y cabeza de lista del PSOE cántabro al Congreso, Elena Salgado, aseguró hoy que la última legislatura, desde la llegada de los socialistas al Gobierno de la Nación, ha sido "la mejor época de la democracia para la economía y el bienestar" de los cántabros y, por ello, consideró que "hay que repetir". Según dijo, el "verdadero impulso" de la región comenzó en 2004 con la victoria del PSOE y se debe "a la buenísima relación y al compromiso del Gobierno de España con el Gobierno de Cantabria".
Salgado contrapuso las inversiones del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en la región con las de la última legislatura del PP y afirmó que en la comparación "no hay color". En su opinión, las inversiones del Partido Popular eran "inversiones de papel", porque algunos proyectos no tenían "ningún dinero asociado", y la inversión real del Gobierno socialista "casi duplica" la de la legislatura anterior.
"Ésa es nuestra tarjeta de visita, mi presentación", recalcó la candidata en un almuerzo con periodistas de la región y con representantes autonómicos del partido, entre ellos la secretaria general del PSC-PSOE, Lola Gorostiaga; el secretario de Organización, José Guerrero; el portavoz en el Parlamento cántabro, Martín Berriolope, y el también candidato socialista al Congreso Javier Incera.
Con esos argumentos confía en concitar apoyos para el proyecto socialista en las elecciones generales. "No hay ningún truco. Ésa es la fórmula con la que espero convencer a muchas personas que en las elecciones autonómicas" votaron al PRC, para que ahora apoyen al PSOE, apostilló.
Según dijo, se trata simplemente de la constatación de que en los últimos cinco años, en que el PSOE ha gobernado en coalición en la región con los regionalistas, Cantabria "va mucho mejor que antes", y de que las "buenísimas relaciones" existentes entre Rodríguez Zapatero y el presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, se traducen en una colaboración intensa para que la región "ocupe el lugar que le corresponde" y se sitúe "en los puestos de cabeza".
Junto a ello, defendió el compromiso del Gobierno de España con algunas de las demandas de la región, como el tren de alta velocidad o la financiación del desfase presupuestario de las obras del Plan Director del Hospital Valdecilla.
ALTA VELOCIDAD.
Sobre el tren, dejó claro que hay planes y compromisos. "Los planes están ahí, los compromisos están ahí y el presidente del Gobierno cumple esos compromisos", remachó la candidata socialista, quien señaló que en el caso de la línea hacia Madrid se están siguiendo los pasos y licitando los tramos pero no se puede olvidar que "los proyectos tienen un orden natural".
Así, destacó que el tren de alta velocidad ya ha llegado a Valladolid, después llegará a Palencia y "seguirá", lo mismo que el AVE a Barcelona ha llegado primero a otras ciudades antes de poder llegar a la ciudad condal.
Además, la ministra señaló que el trazado completado hasta Valladolid ya permite a los cántabros ahorrar prácticamente una hora en sus desplazamientos a Madrid en tren, un ahorro de tiempo que se irá incrementando a medida que avance el trazado y será "progresivamente mayor en el futuro". Y a ese trazado se suma el estudio encargado ahora para la conexión de alta velocidad con Bilbao.
VALDECILLA.
Por lo que respecta al coste final de las obras de Valdecilla, recalcó que el Estado tiene un "compromiso firme" de alcanzar un convenio para "hacer frente a ese sobrecoste" que "ni siquiera" está concretado. Sin embargo, recalcó que no hay "urgencia" de firmarlo "mañana" porque las obras no se han interrumpido, y se puede analizar ya después de las elecciones el presupuesto y la previsión de sobrecoste.
En cualquier caso, se mostró sorprendida por el hecho de que critique el sobrecoste "la misma persona que hizo el presupuesto", el ex presidente cántabro y cabeza de lista del PP de Cantabria al Congreso, José Joaquín Martínez Sieso, al que no citó expresamente. "Las transferencias se hicieron con una previsión de 206 millones de euros. Y esa previsión no la hizo el Partido Socialista", agregó.
En su opinión, "seguramente" estuvo "mal presupuestado" y "seguramente" las transferencias no se deberían haber aceptado en esas condiciones. De todas maneras, insistió en que "el Gobierno de España ha mostrado ya su compromiso" y está "absolutamente de acuerdo" con que Cantabria merece tener un hospital de referencia.
COMO UN CÁNTABRO.
Salgado respondió también a algunas de las críticas que le han realizado desde las filas 'populares', entre otras, por el hecho de no ser de Cantabria. "No habiendo nacido aquí, creo que puedo defender los intereses de los cántabros igual que otra persona que haya nacido aquí", sentenció la candidata socialista.
Según dijo, Cantabria no le resulta una "desconocida", porque tiene amigos aquí, procura visitar la región todos los años y considera que conoce Picos de Europa "mejor que el candidato del Partido Popular". Abundando en esa misma idea, la vicepresidenta cántabra y secretaria general del PSC-PSOE, Lola Gorostiaga, afirmó que Salgado conoce la región "mejor" que algún senador del PP.
La ministra y candidata del PSOE se mostró además dispuesta a participar en todos los debates que le propongan. "En una campaña lo que hay que hacer son debates y como nosotros tenemos ideas, proyectos y programa para debatir, estamos encantados de participar en todos los debates que se nos propongan", apuntó.
Además, resaltó el hecho de que los grandes debates electorales entre los dos líderes nacionales sólo se han materializado cuando el candidato en el poder era socialista. A su juicio, los debates servirán para "confirmar" lo que los españoles ya saben, que por un lado hay "un proyecto sólido" y, por el otro, "las promesas de todos los días" y sin memoria económica.
Finalmente, sobre las críticas recibidas por la Ley Antitabaco y por la fallida ley sobre el alcohol, la ex ministra de Sanidad aseguró que la primera de ellas es hoy una de las leyes antitabaco "más suaves" de Europa y si ha servido para que un millón de personas dejen de fumar, es una ley "excelente".
En cuanto a la regulación sobre el alcohol, dijo no arrepentirse "en absoluto" de haberla propuesto y, aunque tuvo que escuchar "cosas bastante exóticas" y la ley siga "en el cajón", aseveró que se ha conseguido "algo", porque en 2006 descendió el consumo de alcohol entre los jóvenes.
