SANTANDER, 23 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Dirección General de Protección Civil del Gobierno de Cantabria ha alertado para mañana de la previsión de fuertes nevadas que podrán dejar hasta 25 centímetros de nieve en algunos puntos de la región, así como de vientos de hasta 100 kilómetros por hora en el litoral, fenómenos que mantendrán a la región en nivel naranja de alerta.
Según el pronóstico de la Agencia Estatal de Meteorología, para mañana se prevén fuertes nevadas en Liébana y Campoo, donde se podrán acumular hasta 25 centímetros de nieve. En el centro de Cantabria y Valle de Villaverde la acumulación alcanzará los 18 centímetros. En todas estas áreas, la cota de nieve irá descendiendo a lo largo del día de los 1.000 a los 700 metros.
En el litoral de Cantabria, Protección Civil también avisa de la activación de la alerta naranja por fuertes vientos, rachas del Noroeste que alcanzarán los 100 kilómetros por hora. La alerta naranja se mantendrá también mañana en la costa por mar muy gruesa, con olas de 5 y 6 metros.
Ante esta situación y para evitar riesgos innecesarios, el Gobierno de Cantabria, a través del Servicio de Protección Civil, recomienda solicitar información previa del estado de las carreteras y de la situación meteorológica, y evitar el viaje en coche siempre que no sea necesario, y utilizando, a ser posible, el transporte público.
Si es imprescindible realizar el viaje, el Gobierno aconseja llevar el depósito de combustible lleno, cadenas, ropa de abrigo, comida y teléfono móvil. Además, se debe prestar especial atención a las zonas donde puedan aparecer placas de hielo.
En caso de quedarse bloqueado, hay que permanecer en el interior del vehículo, con las luces encendidas, el motor en marcha y la calefacción puesta, renovando cada cierto tiempo el aire y comprobando que la salida del tubo de escape permanece libre.
VIENTO
Por lo que respecta al viento, el Ejecutivo recomienda a la población asegurar las puertas y ventanas de su vivienda y guardar o retirar los objetos del exterior que puedan ser llevados por el viento. Además, se aconseja evitar caminar por la calle en lugares próximos a muros, tapias, árboles y cornisas.
En los desplazamientos por carretera se debe tener precaución, ante la posibilidad de encontrar sobre la calzada objetos o restos arrastrados o derribados por el viento. También hay que extremar la precaución cuando se circule por carreteras de las zonas altas de la región y se ha de adecuar la velocidad a la capacidad de dominio del vehículo ante ráfagas inesperadas de viento.
Tampoco se debe emplear el teléfono de forma abusiva, únicamente para comunicar situaciones de riesgo o emergencia. Asimismo, se recomienda seguir la evolución meteorológica a través de los medios de comunicación locales.
Por último, no se debe realizar ningún tipo de quemas de rastrojos ni arrojar colillas, ni practicar ninguna actividad que pueda originar fuego, dado el elevado riesgo de incendio que existe en la región.
Para comunicar situaciones de riesgo o emergencia se debe llamar al teléfono de emergencias 112 SOS Cantabria, según recordó el Gobierno regional en nota de prensa.
