El 77% de los menores que se beneficiaron del programa de acogimiento residencial de C-LM eran de nacionalidad española

Actualizado: lunes, 18 septiembre 2006 20:13

TOLEDO, 18 Sep. (EUROPA PRESS)

El 77 por ciento de los menores que se han beneficiado en los últimos años del programa de acogimiento residencial de la Consejería de Bienestar Social de Castilla-La Mancha son de nacionalidad española, según aclaró hoy el consejero de Bienestar Social, Tomás Mañas.

Mañas especificó que a finales de diciembre de 2005 el número de menores acogidos por este sistema ascendía a 489, 125 de ellos extranjeros; mientras que a finales de junio de este año eran 500 los menores acogidos, de los que 133 no tenían la nacionalidad española.

En su comparecencia ante la Comisión correspondiente de las Cortes regionales para dar cuenta de las actuaciones, programas y recursos destinados a la atención a los menores, el consejero explicó que el número de acogimientos por este sistema ha experimentado un crecimiento sostenido en la región, a pesar de que, en el último año, se han abierto seis nuevos recursos.

El de acogimiento residencial es uno de los ocho programas que desarrollan la Ley del Menor de Castilla-La Mancha, junto al de atención al menor en su contexto familiar y comunitario, intervención familiar, acogimiento familiar, adopción, atención a menores en conflicto, autonomía personal y el de estancias temporales de menores extranjeros, en los que la Comunidad Autónoma ha invertido, en los últimos tres años, más de 70 millones de euros.

ACOGIMIENTO FAMILIAR.

En cuanto al programa de acogimiento familiar, resaltó que durante el primer semestre del año el número de menores que se encontraba en esta situación era de 567, ascendiendo a 483 el número de familias acogedoras existentes en la Comunidad Autónoma en ese mismo periodo del año.

El titular de Bienestar Social, quien destacó que en la Comunidad Autónoma hay actualmente unos 350.000 menores de 18 años, señaló que, en el programa de atención a familias en situación de riesgo, el año pasado se atendieron a 2.289 familias, y durante el primer semestre del año se ha atendido a 1.243 a través de los centros de orientación; mientras que a través del programa de mediación familiar y orientación, durante el pasado año se atendieron a más de 1.700.

En cuanto al programa de adopción, Tomás Mañas reveló que mientras que la de caracter regional ha disminuido, la internacional ha sufrido un "fuerte incremento", que se constata en el número de solicitudes, que han pasado de las 183 en 1999 a las 416 en 2005, siendo, en su mayoría, referidas a China, Rusia, Colombia, e incrementándose las dirigidas a países como Albania, Etiopía o Nepal.

MENORES EN CONFLICTO.

Otro de los programas de la Consejería es el de atención a menores en conflicto, que cuenta con el apoyo de 35 profesionales repartidos en las cinco provincias a través de Equipos de Atención al Menor (TAM). Según dijo, Castilla-La Mancha cuenta con 94 plazas en centros, tanto de régimen abierto como cerrado, destinadas a menores en conflicto social, siendo la previsión la de aumentar estas plazas a 106 en los próximos meses.

Dentro de este programa, durante el año pasado se llevaron a cabo 2.059 intervenciones con menores en conflicto, de las que 1.299 fueron de caracter judicial, aunque la mayoría de ellas por delitos o faltas de escasa relevancia. Un 85,7 por ciento de los menores afectados por las medidas administrativas y judiciales eran de nacionalidad española.

Finalmente, Mañas dio cuenta del programa de autonomía personal, para menores de entre 16 y 24 años, del que se beneficiaron 199 usuarios en 2005 y 160 durante los seis primeros meses de 2006; y el programa de estancias temporales de menores extranjeros, gracias al cual, en 2005, llegaron a la región 1.493 jóvenes, en su mayoría del Sahara y Bielorrusia.

Tras la intervención del consejero, la portavoz del PP en materia de Bienestar Social, Teresa Aguirre, se interesó por los niños atendidos por la Junta, las ayudas para integración de menores, el dinero invertido en el programa de autonomía personal, la rehabilitación en los centros y las quejas por falta de información y agilidad en cuanto a las adopciones.

Por su parte, el parlamentario socialista Antonio Molina alabó la gestión del Ejecutivo en la materia, al apostar por dar más calidad y estabilidad a los menores, en lo que consideró una política social "acertada e innovadora".