Reconoce que la cifra de paro es "muy elevada" pero también que C-LM "está demostrando tener ciertas fortalezas" comparada con otras CCAA
TOLEDO, 9 May. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta y consejera de Economía y Hacienda, María Luisa Araújo, cree que aunque "es muy difícil hacer previsiones" actualmente, Castilla-La Mancha cerrará este año 2010 "con un indicador en positivo" que, aunque "no va a ser brillante", puede alcanzar un crecimiento del 0,5 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB).
En una entrevista concedida a Europa Press, Araújo señaló que en la Comunidad Autónoma "podemos pensar en un crecimiento del 0,5%, pero no mucho más", convencida de que, no obstante, "el futuro y lo que pase este año depende de todos", por lo que habrá que ponerse "manos la obra".
"Estamos en un momento difícil, pero creo que tenemos que comenzar a trabajar para alimentar la confianza y tenemos un fundamento sólido" que son algunos indicadores "que están empezando a mejorar", entre los que citó el comportamiento positivo de las exportaciones o, en términos de demanda interna, las ventas de comercio minorista, la matriculación de vehículos o los datos del sector turístico.
A su juicio, "que remontemos depende de todos y cada uno de nosotros; lo importante es tener una actitud positiva". En este sentido, insistió en que "verdaderamente la solución a esta situación de dificultad la vamos a encontrar más rápido si caminamos todos juntos".
Aludió en este punto al Pacto por Castilla-La Mancha al que "el PP ni vino" para "traer sus propuestas", segura de que si en la oposición "tienen una fórmula milagrosa, una fórmula mágica, su sentido de la responsabilidad les debería impulsar a plantearla en un foro en el que, además, no está sólo el Gobierno regional".
EL PP NO DEBE TENER FÓRMULAS MILAGROSAS
"Yo sospecho que no deben tener esa fórmula milagrosa, especialmente viendo cómo en las comunidades autónomas donde tienen el gobierno no consiguen controlar el problema del desempleo", señaló la responsable económica del Gobierno regional, quien vio "una pena" que en la región no se pueda producir un encuentro similar al protagonizado esta semana entre el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el del PP, Mariano Rajoy.
A su juicio, eso supondría un "punto de inflexión" y serviría para que en la oposición "se den cuenta de que su primer compromiso es con Castilla-La Mancha y que deberían trabajar no con el Gobierno de Castilla-La Mancha sino para ayudar a Castilla-La Mancha".
Respecto a los datos del desempleo en la región, donde el número de parados supera los 200.000, reconoció que la cifra "es muy elevada pero también es verdad que Castilla-La Mancha está demostrando tener ciertas fortalezas frente a lo que está sucediendo en otros territorios y en el conjunto del país".
Aclaró que el índice del paro de la Comunidad Autónoma "no es un dato para la satisfacción" pero sí "un indicador de que juntos, trabajando todos de manera coordinada, empresarios, sindicatos y Gobierno regional, podemos conseguir más cosas".
ESTABILIZAR LOS MERCADOS
También habló de cómo influirá "sin duda" la rebaja de la calificación de la deuda española en la de Castilla-La Mancha, y reconoció que "estos días no están los mercados en buenas condiciones como para salir con una emisión de deuda de nuestro país o de nuestra Comunidad Autónoma".
"Habrá que esperar a que se tranquilicen un poco", advirtió María Luisa Araújo, quien agregó que el hecho de que en estos momentos la Unión Europea "sea capaz de poner en marcha un plan de apoyo a uno de los países que forman parte de la zona euro, es importante e interesante y contribuye a estabilizar los mercados".
Finalmente, y respecto al plan de austeridad del Ejecutivo autónomo que estará listo para ser presentado a finales de mayo, subrayó cómo "la reducción del déficit es una tarea a la que tenemos que atacar desde diferentes frentes", moderando el gasto, optimizando su gestión y propiciando "un mejor escenario de ingresos".
"Desde la perspectiva del gasto público es obvio que el principal ahorro debe venir del funcionamiento de la propia administración", y en el caso del sector público regional el objetivo es "compactarlo" y "aprovechar las sinergias de unir la actividad de distintas empresas en una".
Aunque el Gobierno de Castilla-La Mancha no ha calculado "a qué porcentaje de ahorro llegaremos" pues el plan "no nos lo planteamos en esos términos", el resultado --teniendo en cuenta que excepto La Rioja no hay otra comunidad autónoma "tenga menos empresas públicas" que esta-- "será interesante", según reveló la vicepresidenta y consejera de Economía y Hacienda.
