El informe de finanzas de la Junta a 30 de junio de 2011, ya en Cortes

Actualizado: lunes, 19 marzo 2012 21:20
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TOLEDO, 19 Mar. (EUROPA PRESS) -

   El informe sobre la situación de las finanzas de la Junta a 30 de junio de 2011, elaborado por la Sindicatura de Cuentas de Castilla-La Mancha, y conocido en septiembre de 2011, ha sido publicado en el Boletín Oficial de las Cortes de Castilla-La Mancha este lunes.

   El informe, a petición de la Mesa de las Cortes siguiendo una iniciativa del Gobierno autonómico, refleja que el Gobierno de José María Barreda dejó una necesidad de liquidez a corto plazo de 2.813 millones de euros y 167.727 facturas pendiente de pago. Además, señala que se concedieron 381 millones de euros en subvenciones sin dotación presupuestaria y sin reserva de crédito.  

   Entre los datos y estimaciones más relevantes sobre la situación de las finanzas públicas de la Comunidad Autónoma a esa fecha, figura un endeudamiento vivo de la Junta de 5.560 millones de euros, un endeudamiento vivo del sector público empresarial y fundacional de 1.875 millones de euros.

   Además, el informe --en sus conclusiones, recogidas por Europa Perss-- establecía unas necesidades de liquidez a corto plazo de 2.813 millones de euros, de los que 2.539 millones procedían de las obligaciones pendientes de pago derivadas de la ejecución de los presupuestos.

   La Sindicatura de Cuentas detecto, en el análisis de los derechos y obligaciones reconocidas en el presupuesto a esa fecha, una "situación de desequilibrio" en las cuentas públicas causada por "una presupuestación que provocaba la infradotación de las demandas de gasto, y un nivel de ingresos insuficiente para hacer frente a tales demandas".

DESEQUILIBRIO

   Desequilibrio, según la Sindicatura, que se acentuó por la tramitación y aprobación de modificaciones de crédito sin financiación, que provocaron aumentos de gasto sin cobertura de recursos adicionales.

   La cifra de déficit por operaciones no financieras se estimaba en 2.251 millones de euros, lo que significaba, de haber persistido en la misma, una desviación respecto de los compromisos financieros alcanzados en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera.

   En su análisis, la Sindicatura estimaba que la situación financiera de la Junta y sus organismos autónomos a 30 de junio de 2011 necesitaban una liquidez de 2.813 millones de euros, de los que 2.539 millones procedían de las obligaciones pendientes de pago derivadas de la ejecución de los presupuestos.