TOLEDO, 30 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Instituto de Consumo de Castilla-La Mancha informa a los consumidores de la existencia de un producto que se utiliza en la conservación de algunos calzados procedentes del mercado asiático que no está autorizado en la Unión Europea y que ha provocado reacciones alérgicas en distinto usuarios, aunque ninguno de ellos en la región.
Este producto, denominado "dimetil-fumarato", se introduce en los zapatos, en pequeñas bolsitas, para evitar la humedad y los hongos y prolongar su conservación. En Castilla-La Mancha, los inspectores de consumo solamente han localizado e inmovilizado una partida de 1.800 pares de botas que se encontraban en un almacén mayorista de distribución de calzado, señaló en nota de prensa el Gobierno regional.
Según la red de alerta, la alergia que dicha sustancia provoca se manifiesta mediante picores, rojeces, quemaduras y dolores musculares.
La Unión Europea permite el uso de "Silica-Gel" un producto que tiene las mismas funciones que el encontrado estos días y que, sin embargo, no produce ningún tipo de alergia.
Por todo ello el Instituto de Consumo de Castilla-La Mancha aconseja a los consumidores que revisen el interior de los calzados, especialmente las botas, para comprobar que se trata del producto homologado por la UE.
Así, el Instituto de Consumo de Castilla-La Mancha, ha transmitido esta información a los Servicios Provinciales de Consumo para que importadores, distribuidores y vendedores suspendan la comercialización de estos productos.
La Red de Alerta es un sistema de intercambio rápido de información entre los Estados miembros y la Comisión Europea sobre los riesgos que puede entrañar el uso de determinados productos de consumo para la salud o la seguridad de los consumidores, así como de las medidas adoptadas.
